El entendimiento entre el bloque europeo y el ejecutivo ecuatoriano llega en un momento en que el país andino intenta encontrar soluciones a una crisis en su sistema penitenciario
La Unión Europea (UE) le ofrecerá apoyo a Ecuador en un proceso para fortalecer de manera integral su sistema penitenciario, golpeado por la violencia en los últimos años, a lo que se suma el hacinamiento y la debilidad en el control estatal de las prisiones.
Altos representantes del Servicio Nacional de Atención Integral a Personas Privadas de Libertad (SNAI), la agencia penitenciaria del Estado, y de la UE se reunieron para evaluar compromisos conjuntos orientados a impulsar el sistema de rehabilitación social en el país.
Luis Eduardo Zaldumbide, director de la entidad ecuatoriana; y Charles-Michel Geurts, embajador de la UE en el país, ratificaron los «compromisos interinstitucionales para impulsar el Sistema Nacional de Rehabilitación Social y Reinserción Efectiva» de los presos en la sociedad, agregó el SNAI en un comunicado, reseña la agencia EFE.
El organismo de las prisiones ecuatorianas explicó que el bloque europeo se comprometió a brindar asistencia técnica «para fortalecer el sistema penitenciario de forma integral» en Ecuador.
Geurts, mostró su respaldo a las acciones tomadas por el Gobierno ecuatoriano y el SNAI para la recuperación y el control de las prisiones, que en los últimos años han sido escenario de frecuentes masacres entre bandas de reos.
El entendimiento entre la UE y Ecuador llega en un momento en que el país andino intenta encontrar soluciones a una crisis en su sistema penitenciario, cuya expresiones más trágicas han sido las frecuentes masacres entre bandas de presos por el control de las prisiones.
En las masacres, ocurridas desde 2020, fueron asesinados más de 450 presos, pero la disputa al interior de las prisiones también ha saltado a las calles.
Daniel Noboa, presidente de Ecuador, decretó un “estado de excepción” a principios de enero y un día después firmó un decreto que admitía «un conflicto armado interno».
Con el decreto, el mandatario ecuatoriano garantizó la intervención de las Fuerzas Armadas en operaciones conjuntas con la Policía para «neutralizar» grupos de delictivos organizada que ocasionaron el caos y a los que identificó como «terroristas».
La espiral del crimen en cárceles y calles de los últimos años, llevó a que Ecuador a ubicarse entre los países más violentos de América Latina y del mundo, con una tasa de alrededor de 45 homicidios intencionales por cada 100.000 habitantes en 2023.