Señaló que la inclusión social es el hilo conductor y crucial para el desarrollo de Brasil y que el producto interno bruto de esa nación irá en ascenso en los próximos meses
Este miércoles 2 de agosto, el presidente de Brasil, Luiz Inacio Lula da Silva, prometió un crecimiento económico sólido y confiable de Brasil que contrarrestará todas las proyecciones publicadas por el Fondo Monetario Internacional (FMI).
«Soy un tipo optimista» y «cuando la gente se da cuenta de que la economía está funcionando, los empleos comienzan a aparecer, el salario comienza a aumentar, la inflación comienza a caer. La gente empieza a darse cuenta de que las cosas están mejorando para ellos», afirmó Lula por sus redes sociales.
Resaltó que Brasil va a crecer de forma «sólida y confiable», por lo que desafió al FMI en relación a sus predicciones del PIB de Brasil durante los próximos años.
El pasado mes de mayo, el FMI registró un descenso de 0,9%, sin embargo, ya para el mes de julio, el organismo anunció el crecimiento de 2,1% en la economía brasileña.
El exsindicalista aseguró un crecimiento progresivo. «Vamos a hacer un crecimiento distributivo. Va creciendo, va distribuyendo… para que la vida de las personas crezca de acuerdo con el crecimiento del país. Eso es lo que interesa a la gente y va a suceder».
Así mismo señaló que la inclusión social es el hilo conductor y crucial para el desarrollo de Brasil.
«Mucho dinero en la mano de unos pocos, como era antes, es concentración de riqueza. Poco dinero en la mano de muchos es distribución de riqueza. Cuando todos tengan un poco, nos daremos cuenta de que las cosas van a mejorar», subrayó.