En el país se han registrado hasta ahora más de 17.000 contagios y más de 341 fallecidos, con tendencia al alza, mientras que los hospitales el país balcánico están cada vez más desbordados
Nuevos incidentes se registraron esta noche en las protestas de miles de personas en Belgrado y Novi Sad contra las nuevas restricciones anunciadas contra la epidemia del coronavirus en Serbia.
En Belgrado, la policía lanzó gas lacrimógeno para dispersar la muchedumbre, que tiró piedras, bengalas incendiadas y otros artefactos a los agentes desplegados frente al edificio del Parlamento serbio, según el canal de noticias N1.
Grupos de manifestantes rompieron las barricadas de metal y lanzaron bengalas a las puertas del Parlamento, agregó un fotoreportero de EFE-EPA desde el lugar de los hechos.
En la norteña cuidad de Novi Sad, los manifestantes rompieron ventanas en el Ayuntamiento local, en la sede de la emisora de televisión pública de la región RTV y de la sede del Partido Progresista Serbio (SNS), del presidente del país, Aleksandar Vucic.
La nueva protesta en Belgrado se produce después de una violenta manifestación la noche pasada contra las nuevas restricciones anunciadas contra la epidemia del coronavirus en Serbia.
Esta tarde, miles de personas volvieron a salir al centro de Belgrado y también en otras varias ciudades del país balcánico.
Las protestas se producen poco después de que Vucic acusara a «derechistas, criminales y opositores» de los enfrentamientos de anoche, que se saldaron con 60 heridos, 43 de ellos policías.
Las infecciones con el coronavirus está subiendo notablemente en Serbia en las últimas semanas, sobre todo después de que las autoridades decidieran en junio levantar gran parte de las restricciones.
Según los críticos, los alivios se realizaron de cara a las elecciones parlamentarias del 21 de junio, ganadas con claridad por el SNS de Vucic.
Serbia ha registrado hasta ahora más de 17.000 contagios y más de 341 fallecidos, con tendencia al alza, mientras que los hospitales el país balcánico están cada vez más desbordados con enfermos de COVID-19.