«Los efectos de la COVID-19 en el mercado laboral de los Estados Unidos y en la salud de las comunicades estadounidenses son asuntos que siguen siendo preocupantes», escribió el presidente Donald Trump
El presidente saliente de Estados Unidos, Donald Trump, prorrogó hasta el próximo 31 de marzo dos decretos que suspenden la entrada en el país de muchos solicitantes de residencia permanente y otros trabajadores temporales, pese a la oposición de numerosas empresas de la nación.
Las medidas que renovó Trump caducaban el pasado jueves y el mandatario las emitió en abril y en junio, con el argumento de que la destrucción de empleos provocada por la crisis de la COVID-19 ameritaba nuevas restricciones migratorias.
«Los efectos de la COVID-19 en el mercado laboral de los Estados Unidos y en la salud de las comunicades estadounidenses son asuntos que siguen siendo preocupantes», escribió Trump en una proclamación presidencial en la que ordenó prorrogar ambos vetos hasta el 31 de marzo.
El presidente electo de EE.UU., Joe Biden, tendrá el poder de eliminar esos vetos una vez que llegue al poder el 20 de enero, pero no ha aclarado si lo hará.