El ministro de Asuntos Exteriores alemán, Heiko Mass, se mostró convencido de que las amenazas no son la mejor vía para convencer a Irak de la conveniencia de mantener las tropas extranjeras en ese país por el bien de la estabilidad en la región y la seguridad en Europa
«Las amenazas no funcionan para convencer a Irak, sino los argumentos, que son numerosos. Pero la última palabra naturalmente la tiene Irak», dijo Maas en una entrevista con la emisora Deutschlandfunk al referirse al anuncio el domingo del Parlamento de ese país de requerir a su gobierno que acabe con la presencia de cualquier tropa extranjera en su territorio.
El ministro agregó que hay que empeñarse de forma activa en lograr que la comunidad internacional siga dispuesta a apoyar a Irak, para cuya reconstrucción se ha invertido tanto en los últimos años, subrayó.
«Estamos muy preocupados. Sin el compromiso de la comunidad internacional contra el Estados Islámico, la inestabilidad en Irak seguro aumentará», dijo.
Advirtió que sobre todo hay que velar por que Irak no se convierta en escenario de una guerra entre Estados Unidos e Irán y en ese sentido reiteró la disposición de Europa al diálogo.
«Los europeos mantienen abiertos con ambas partes canales de diálogo operativos. Contribuiremos a que en Irak no se libre una guerra subsidiaria. Nos sentimos responsables ya que en la lucha contra el terrorismo internacional en Irak nuestros propios intereses en materia de seguridad se ven ampliamente afectados», dijo.
Agregó que aprovecharán todas las posibilidades para apostar por la diplomacia y dar una oportunidad a la seguridad en Europa.
En ese sentido advirtió que en cualquier caso hay que evitar el conflicto se extienda en Oriente Próximo, porque sería un obstáculo para la seguridad en Europa. EFE