La cotización del petróleo cae con fuerza por el temor a un frenazo de la economía mundial y por la falta de acuerdo entre la Opep y otros países productores de crudo
El miedo a que el impacto del coronavirus en la economía global sea mayor de lo previsto se extiende entre los inversores, que abandonan la renta variable -lo que tiñe de rojo las bolsas de todo el mundo- y buscan refugio en activos considerados más seguros, como el oro, el yen y la deuda de países solventes, principalmente EE.UU. y Alemania.
El precio del petróleo cae con fuerza por el temor a un frenazo de la economía mundial y por la falta de acuerdo entre la OPEP y otros países productores de crudo.
El Ibex 35, el selectivo de la Bolsa española, bajaba 3,6% a las 14 horas; Londres perdía 3,4%; Fráncfort 3,5%; París 3,8%; y Milán 3,3%. Mientras en Asia, Tokio cayó 2,72%; Hong Kong 2,32%; y Seúl 2,16%.
Según Sergio Ávila, de IG España, los inversores temen que el impacto económico derivado de la expansión del coronavirus sea mayor del calculado inicialmente y que afecte no solo a Asia sino también a Europa y EE.UU.
En la misma línea, Renta4 cree que la aversión al riesgo se ha intensificado en los mercados ante el temor a un parón en la economía y en los resultados empresariales.
Frank Häusler, de Vontobel AM, prevé un descenso significativo en el ritmo de crecimiento de la economía mundial, pero espera una recuperación en verano.
Bank of America insiste en que las políticas monetaria y fiscal no evitarán los problemas en la oferta causados por la interrupción de las cadenas globales de suministro, pero precisa que pueden minimizar los efectos de la epidemia en la demanda.
El Banco Asiático de Desarrollo ha cifrado entre 77.000 y 347.000 millones de dólares (entre 68.000 y 306.000 millones de euros) el impacto del coronavirus en la economía mundial, lo que supondría entre el 0,1 % y el 0,4 % del PIB global.