“Esta es una política inmediatista como consecuencia del abandono de la actividad económica y comercial en el país. Habría que ver si la élite recibe la bolsa CLAP y le alcanza para alimentarse todo un mes”, señaló el secretario de organización de Opina
La Ley de Impuesto a las Grandes Transacciones Financieras (IGTF) aprobada por el Poder Legislativo está muy lejos de cubrir la inversión social, porque en el fondo lo que busca es no reducir los gastos del político, afirmó Irwing Ríos, secretario nacional de organización del Partido Opinión Nacional (Opina).
Aseguró que en Venezuela durante los últimos 64 años ha sucedido lo mismo. «Los políticos que han administrado la República esperan un golpe de suerte que aumente el precio del petróleo o alguna materia prima que les permita multiplicar los ingresos a las arcas, para gastar a discreción y sin control; pero cuando se quedan sin dinero, recurren al aumento de los impuestos».
“Eso demuestra la poca planificación del desarrollo económico y que no hay interés en que crezca la República, porque a menos impuestos, más actividad económica se desarrolla”, aseveró Ríos.
Nuevos argumentos
A juicio del secretario nacional de Opinión Nacional (OPINA), se aumentan los impuestos porque hay una clara reducción de los ingresos, producto del mercado de las materias primas del que el Estado tiene el monopolio y «que ha empobrecido tanto al ciudadano como a la República; ahora deben ver de dónde sacan plata sin importar el daño que producen».
“Esta es una política inmediatista como consecuencia del abandono de la actividad económica y comercial en el país. Habría que ver si la élite recibe la bolsa CLAP y le alcanza para alimentarse todo un mes”, señaló el dirigente político.
Esta medida económica, sostiene, no fue consultada: «Esto demuestra que la democracia participativa y protagónica no existe; de hecho, no hablan de ello”.
Reitera que el IGTF no es una medida acertada para recuperar la economía nacional. “Ellos y el país saben que no. Su visión política contempla la dependencia del ciudadano, producto del empobrecimiento sistemático. Juegan con las materias primas en el mercado internacional como jugar en el casino, y cuando los números no les dan, pechan a los que trabajan. Piden austeridad y sacrificio, pero la clase política en el poder no reduce sus gastos, por el contrario, los aumenta».
Burro que piensa bota la carga
Ríos asegura que la situación de los trabajadores se empeorará con la entrada en vigencia del impuesto, porque tendrán que pagar más y verán menos soluciones.
En este mismo sentido «eso hará que muchos sigan abandonado el país y busquen otros horizontes. El Ejecutivo sabe que con este nuevo plan deprime la economía”.
Lucha contra la corrupción
Consultado sobre las medidas anticorrupción que han desvelado irregularidades en las filas oficialistas, Ríos destacó que estos hechos son expresión de lo que se ha construido durante 64 años.
“Es tan costoso ajustarse a Derecho y más fácil y más rentable el camino de la ilegalidad. Se ha empobrecido tanto a la gente, que muchos aspiran a tener una vida de lujos y toman el camino fácil”, denunció el dirigente político.
A juicio del internacionalista, la corrupción «también se comete al colocar el dinero sin declarar fuera del país, cuando no se puede justificar. El ejemplo dicta la dinámica. Por eso nosotros desde Opina proponemos el plan de las tres reformas que significan restituir los derechos de la población, restituir la dignidad al venezolano y que se le permita generar sus propias riquezas».