Tras la reunión de su Consejo de Gobierno, el Banco Central Europeo reiteró que prevé que los tipos de interés sigan en el nivel actual hasta, al menos, la primera mitad de 2020
El Banco Central Europeo (BCE) decidió este jueves mantener todas sus tasas de interés, también la de los depósitos bancarios, pese a que se esperaba una caída tras el aumento de la incertidumbre económica.
Tras la reunión de su Consejo de Gobierno, el BCE reiteró que también prevé que los tipos de interés sigan en el nivel actual hasta, al menos, la primera mitad de 2020 y prepara a los mercados para nuevas medidas de expansión monetaria en los próximos meses.
El Banco indicó que se compromete a reinvertir los bonos «durante el tiempo que sea necesario para mantener unas condiciones de liquidez favorables y un elevado grado de acomodación monetaria».
La entidad europea añade que es necesaria una política monetaria muy expansiva durante un periodo prolongado porque la inflación es baja y no alcanza su objetivo de una tasa ligeramente por debajo de 2%.
A diferencia de otros bancos centrales, que subieron los tipos de interés hace meses y tienen más margen de maniobra para bajarlos, el BCE se encuentra en una situación más complicada porque no lo ha hecho desde julio de 2011, cuando incrementó la tasa de interés a los depósitos en 25 puntos básicos, hasta 0,75%, pero en noviembre de ese mismo año la volvió a bajar hasta 0,50%.
Un año después, el BCE llevaba la tasa de depósito a 0%, en julio de 2012, y en junio de 2014 la puso en negativo, es decir comenzó a cobrar a los bancos por el exceso de reservas.