La selección nacional comenzó las eliminatorias con el píe izquierdo y el tema de los entrenamientos no ha sido diferente en cuanto a la preparación para enfrentar a Paraguay
El entrenamiento de la Vinotinto en Mérida fue protagonizado por las grandes dificultades que presentó el césped del estadio Guillermo Soto Rosa y que obligaron al equipo a cambiar de sede para la práctica de la tarde de ayer. El entrenamiento pasó a las 4 de la tarde a las instalaciones de la cancha de la Academia Emeritense.
En otros temas, las habitaciones no contaban con suficiente aire y las comunicaciones eran pésimas para el trabajo logístico de la oncena nacional y toda su delegación.
La planta eléctrica del hotel donde se hospedaban los jugadores y cuerpo técnico, no funcionaba y por esta razón tuvieron que aguantar 11 horas sin luz. Mérida pudiera ser excluido de los planes de la FVF que pensaban albergar otros juegos del combinado nacional, incluyendo el recibimiento a los chilenos de Arturo Vidal.
Informaciones de personas adentradas en la concentración, aseguran que se le pidió al Comité Organizador que buscara el apoyo de la gerencia regional de la empresa eléctrica para que no dejaran sin energía eléctrica el sector del hotel y sus alrededores, algo que finalmente no se logró.
Otro dato importante para las dos primeras fechas de eliminatorias, es que Venezuela movió logística a través de 18 países para traer sus jugadores, convirtiéndose así la FVF en una de las entidades que mas dinero gasto para éstas dos primeras jornadas 2022.