Esta medida forma parte de la estrategia de prevención de contagios entre deportistas durante los Juegos y se sumará a otras ya anunciadas como su aislamiento dentro de las instalaciones olímpicas y la restricción de sus movimientos
Los atletas que participarán en Juegos Olímpicos de Tokio deberán someterse a test diarios de COVID-19 durante la competición, según las nuevas directrices sanitarias presentadas por los organizadores este miércoles 28 de abril.
Otra de las nuevas medidas preventivas es la obligatoriedad de someterse a dos test del virus antes de viajar desde sus respectivos países hacia Japón, según informaron los organizadores en una nota conjunta con los comités Olímpico y Paralímpico internacionales.
Los deportistas no tendrán que cumplir la cuarentena de 14 días actualmente requerida por el Gobierno japonés a todo viajero que venga del exterior, aunque deberán someterse a nuevos test luego de su llegada al país asiático.
Además, los deportistas deberán remitir un plan de actividades detallando todos sus movimientos previstos y atenerse al mismo, así como minimizar el contacto con otros atletas, según el manual, que también advierte de que incumplir estas directrices podría conllevar la descalificación.
Atletas y miembros de los equipos olímpicos únicamente podrán emplear los medios de transporte específicos habilitados por la organización, y no el transporte público. Sólo podrán comer en instalaciones de sus alojamientos y en las sedes de competición y entrenamiento.
En cuanto a la vacunación, no será obligatoria para los atletas participantes, aunque el Comité Olímpico Internacional (COI) recomienda encarecidamente a las federaciones nacionales que promuevan la inoculación de sus deportistas y prometió apoyo logístico para los países que tengan dificultades para hacerse con el fármaco.
El presidente del COI, Thomas Bach, mostró su pleno apoyo a las directrices anti-contagios para los deportistas, que fueron presentadas por los organizadores durante una reunión telemática.
Bach señaló su respeto hacia la diligencia de los japoneses para proteger a los ciudadanos y afirmó que el movimiento olímpico está dispuesto a tomar todas las medidas necesarias para minimizar el riesgo y para que los japoneses se sientan seguros.