Una masajista del estado de Florida, en EEUU, se implantó un tercer seno en 2014 con el objetivo de saltar a la fama y convertirse en una estrella de la televisión. Luego de muchos años gracias a su insistencia, hoy logró la fama y asegura que los hombres la desean más
Lo más normal es que una mujer tenga dos senos, pero la YouTuber, cuyo nombre real es Alisha Hesserl , quiere tener su tercer seno «real».
En el 2014 Hesserl, manifestó a través de sus redes sociales que quería realizarse una cirugía para colocarse un tercer seno, pero en lugar de un implante como actualmente lo tiene quiere ingresar nuevamente al quirófano para crear un seno a partir de su propia grasa, la joven de 25 años usó solo una prótesis. Sin embargo, a ella le gustaba tanto su seno falso mediano que realmente quiere ponerse bajo el cuchillo nuevamente con un seno de verdad.
Jasmine estuvo ahorrando dos años para pagarse la operación, que le costó 50.000 dólares. La chica habló con más de 50 cirujanos hasta que consiguió a uno que accedió a realizar el implante: «Me hizo firmar un acuerdo de no divulgación ya que estaba asustado por si se metía en problemas».
Un médico, al que la joven no nombró, aceptó realizar la cirugía por 50 mil dólares, con la advertencia de que debe tener primero un informe psiquiátrico.