Más de 90.000 personas tuvieron que abandonar sus hogares en el Líbano en los últimos seis días, coincidiendo con una oleada de ataques israelíes sin precedentes en casi un año de violencia, informó este miércoles la Organización Internacional para las Migraciones (OIM).
La agencia de la ONU contabilizó 90.530 nuevos desplazamientos desde la publicación de su último recuento el pasado jueves, de entre los que cerca de 40.000 afectados se encuentran albergados en unos 283 centros de acogida establecidos por las autoridades en diferentes puntos del país.
De este modo, en algo menos de una semana se han registrado casi tantos desplazamientos como en un año entero de enfrentamientos entre Israel y el grupo chií Hezbolá, pues desde el estallido del conflicto hasta el jueves había unos 111.000 desplazados del lado libanés.
La semana pasada, el Estado judío intensificó sus acciones con dos oleadas de explosiones en miles de aparatos de comunicación en manos de integrantes de Hezbolá y un bombardeo dirigido contra comandantes de la formación que dejó más de medio centenar de muertos a las afueras de Beirut, incluidos civiles.
Desde este lunes, lanza intensas campañas de bombardeos contra el sur y el este del país, donde solo hoy han muerto 51 personas y otras 223 han resultado heridas, según el último recuento oficial.
En los últimos días, el volumen de huidas desde las áreas meridionales ha sido tal que la carretera hacia Beirut ha sufrido atascos de muchísimas horas, mientras que las autoridades han tenido que abrir un gran número de nuevos colegios para acoger a las familias.
La OIM alertó de que muchos de ellos probablemente han sido desplazados por partida doble y ya habrían abandonado su lugar de residencia inicial durante los primeros once meses de choques fronterizos entre las partes.