Mujeres venezolanas se suman a demanda en Francia vinculada a las prótesis PIP

En Venezuela hay alrededor de 40.000 mujeres que se implantaron estas prótesis y menos del 10% han accionado ante la justicia para recibir las indemnizaciones a las que tienen derecho por las fallas en la certificación del producto

María Cecilia Barrientos es abogada y lleva adelante la representación de un grupo de mujeres portadoras de prótesis mamarias PIP, que están solicitando ante la justicia francesa una indemnización por la sufridos en su salud, debido a las fallas presentadas por las mencionadas por la prótesis PIP.

Nos explica Barrientos que, el 2 de julio se reanudó el cuarto proceso judicial contra empresa TUV y se espera que en la primera semana de septiembre se reanuden las audiencias.

«Representamos a un grupo de mujeres que se hacen parte de la demanda, que se está llevando a cabo en Francia contra la empresa certificadora de calidad de las prótesis mamarias PIP, que se llama TUV encargada de certificar la manufactura del producto», indicó.

Señala que el tribunal se pronunció contra la certificadora TUV y ya se ha determinado que para cualquier mujer que pueda demostrar que tiene las prótesis «tiene derecho a una indemnización de 3.000 euros»

Explica que esto es independientemente «que se le hayan agrietado o haya tenido problemas. Con solo el riesgo que tiene de sufrir algún problema por solo ser portadora de las PIP ya se acredita esta indemnización.»

Señala que, el grupo de abogados solicitó que este monto se elevara hasta los 6.000 euros «y luego existe el caso que acreditan complicaciones de salud por la ruptura prematura de la prótesis. Estas chicas se acreditan ante el tribunal y se les comprueba que en verdad otras complicaciones de salud tienen la opciín de exigir una indemnización superior».

Esto aplica también para mujeres que lograron retirar las prótesis y ya culminaron su proceso y «tienen la oportunidad de accionar contra la empresa TUV».

El grupo de abogados se identifica como «Soy portadora PIP» y poseen una página web para registrarse y sumarse a esta exigencia ante la justicia francesa.