La Asociación Multicultural de Activistas Voz y Expresión (Amavex), denunció que este año por lo menos 300 venezolanos deportados a terceros países, han sido obligados en su llegada a los aeropuertos a comprar pasajes de regreso a Venezuela.
Coalición venezolana urgió al Presidente de Estados Unidos (EEUU), Donald Trump, detener las deportaciones de venezolanos a terceros países, donde son «coaccionados» a devolverse a Venezuela.
Esta coalición, conformada por aproximadamente treinta organizaciones a favor de los derechos humanos, advirtió de esta nueva forma de deportación, en la que, una vez denegado el asilo, EEUU envía a los venezolanos al último puerto desde el que se embarcaron para llegar al país.
Helene Villalonga, presidenta de Amavex, señaló que «estamos ante un nuevo modus operandi, en el proceso de inmigración en el que los agentes de la aerolínea están cumpliendo funciones de inmigración».
La activista lamentó que no se está protegiendo a «todas aquellas personas que han huido del país por motivos políticos».
Asimismo, Amavex denunció que los venezolanos sufren una «revictimización», tras huir de Venezuela y al ser deportados a terceras naciones.
En este sentido, Amavex instó este miércoles 30 de octubre al Gobierno de Trump,a que abra una Comisión de Derechos Humanos que determine «si existe coacción en los puertos de embarque», y pidió al líder opositor Juan Guaidó, que declare «la crisis migratoria en Estados Unidos».