El 31 de julio se cumplen 3 años del asesinato de Carla Ríos.
El homicidio de Carla Ríos, de 39 años de edad, es uno de esos casos donde aún el responsable del crimen sigue suelto y no se encuentra tras las rejas. Su familia no se ha detenido en la búsqueda de justicia y sienten que, a casi 3 años del hecho, las autoridades simplemente dejaron el caso a un lado y desistieron en la búsqueda del presunto homicida, Edward Felipe Chacón, ex pareja de Ríos.
El caso no ha avanzado ya que solo falta la captura del principal sospechoso, autoridades policiales no mantienen una búsqueda activa de este individuo, a pesar de encontrarse en Caracas y con otra identidad, según información suministrada por personas cercanas a la familia.
Todos recuerdan a Carla como una hija ejemplar, una mamá entregada a sus hijos y una excelente hermana. Se graduó como Licenciada en Administración de Empresas, luego comenzó a trabajar en el Seniat donde permaneció durante varios años. También la recordaron como una guerrera, una mujer que sobrevivió y superó el cáncer de estomago. Alguien que ayudaba al prójimo y siempre estaba invirtiendo su tiempo en planes para poder sacar a su familia adelante.
Carla, por merito propio, pudo comprarse su camioneta y su apartamento en La Pastora, municipio Libertador. Tuvo 2 hijos, una niña y un niño, de una relación previa a Chacón.
Edward entró en la vida de Carla un día del año 2014 en Las Mercedes. Este comenzó a llamar su atención enviando notas y conociéndose poco a poco. Pasaron los meses y decidieron iniciar una relación que al final duró 6 años. En ese tiempo, según cuenta la mamá de Carla, Carmen Rodríguez, él nunca mostró actitudes violentas, ni una conducta que representara un riesgo para su hija. En algunas ocasiones discutían por tonterías y Chacón le pedía a la suegra que intercediera por él para que lo disculpara.
En el año 2019, Carla ya había enviado a su hija mayor a Estados Unidos y fue a pasar unos días con ella. A mediados de Octubre, Chacón fue a visitarla, pero los servicios de inmigración de Estados Unidos le negaron la entrada. En ese momento ella se devuelve para apoyarlo y luego pensar con más calma en emigrar.
No fue sino hasta enero del 2020, cuando Carla le menciona a su mamá que no se sentía cómoda con Edward. Le comentó que comenzó a demostrar una actitud controladora, insegura y siempre la estaba celando. Había ocasiones que ella iba a casa de su mamá, o de su papa, y él le preguntaba con quien estaba y hasta la seguía, comenzó a exigirle que se reportara.
En el mes de febrero del mismo año, finalmente, Carla logra separarse de forma amistosa, pero sin cortar las comunicaciones con él.
En marzo del mismo año inició la pandemia y decretan la cuarentena en Venezuela. Carla solo salía a visitar a su mamá y así evitaba que saliera a la calle para prevenir se contagiara de Covid.
En una de esas caminatas, Carmen estaba junto a Carla y una de sus amigas, se encontraron en la vía a un amigo que era dueño de una licorería y deciden compartir con él en el local. Carmen se devuelve a la casa para descansar. A las horas recibe una llamada de su nieto y le dice que Chacón estaba en la casa de su hija discutiendo. El sujeto le había arrebatado el teléfono celular de ella donde leyó un mensaje del amigo preguntando si había llegado bien a su casa. Eso generó una reacción agresiva en Chacón y este decide golpearla en la cabeza con el teléfono. La mamá de Carla llegó al apartamento y los encontró en el cuarto del niño discutiendo.
Carmen lo confronta con un cuchillo de mantequilla que agarró en la cocina, Chacón se tira en la cama en posición fetal y comienza a pedir perdón. Ella le dice que se vaya a dar una vuelta y piense las cosas, la intención era sacarlo del apartamento, pero él se levanta y se va a otro cuarto donde se encierra. Le preguntan en varias oportunidades qué estaba haciendo, pero Chacón no responde. En ese momento entran al cuarto por la fuerza y lo ven sosteniendo un arma de fuego y unas municiones. Él se puso nervioso, las tiró y volvió a pedir perdón. Salió del apartamento y se fue a dar una vuelta. Lo que no sabían es que en ese momento aprovechó y se llevo el pasaporte de Carla.
Cuando ambas se cercioran que salió del edificio, deciden agarrar una maleta y se van de la casa. Luego se trasladaron al Cuerpo de Investigaciones, Científicas, Penales y Criminalísticas, donde denunciaron a Chacón. Las autoridades no actuaron, ni lo detuvieron, en ese momento.
Carla se mantuvo escondida en casa de unos amigos durante un par de meses. En ese momento Chacón comenzó a calmarse y no la acosaba. Le devolvió el pasaporte a Carmen y se fue. Cuando revisan el documento de identidad se da cuenta que le había arrancado la visa y puso una falsa que imprimió.
En el mes de abril, Carla, le dice a la mamá que quiere regresar a su apartamento, pide que la ayude a cambiar las cerraduras para que ella pueda volver a su casa. Carmen va con un cerrajero y hacen el cambio. Lo que no sabían es que Chacón las estaba siguiendo desde hace días y en ese momento estaba escondido en el closet esperando por su ex. Alrededor de la 1:00 am, regresa al apartamento y se encuentra Chacón con un cuchillo y un arma de fuego. La amenaza de muerte al frente de su hijo y se la lleva a un hotel en San Martín, donde intenta abusar de ella. Carla logró escapar diciéndole que su teléfono tenia un GPS y un sistema de alarma que se había activado notificando a las autoridades.
Rápidamente fue a casa de su mama y volvieron a ir al Cicpc y luego al Ministerio Publico donde pusieron la denuncia. En esta oportunidad solo emitieron una orden de restricción en contra de Chacón, pero tampoco lo detuvieron ni lo buscaron.
Pasaron 2 meses sin saber de él, comenzó a escribirle nuevamente a Carla, pero ella ya no quería saber nada de él. En ese momento le envía un perturbador video apuntándose con su arma de fuego en la cabeza diciendo que, si no estaban juntos, él se quitaría la vida. Ella lo bloquea y decide cortar la comunicación.
El 31 de julio, alrededor de las 7:30pm, mientras Carla organizaba el cumpleaños de su hijo, Chacón apareció al frente de la puerta de su edificio en La Pastora, municipio Libertador. Ambos discutieron y es cuando él decidió sacar un arma de fuego para luego accionarla en 2 oportunidades acabando con la vida de Carla Ríos.
Carmen al enterarse corrió hasta el lugar donde asesinaron a su hija. Luego fue al Cicpc a las 9:00pm, donde la mantuvieron hasta las 3:00am esperando para tomar su declaración e iniciar las investigaciones. En varias ocasiones ella les gritaba a los funcionarios que Edward Chacón era el asesino, pero los funcionarios solo respondían: ¿A ti te consta que fue él? ¿Tu lo viste?”. A pesar de la insistencia de ella, los funcionarios no fueron tras el sospechoso inmediatamente. Eso permitió que pudiera evadir a las autoridades.
Hasta la fecha la familia de Carla Ríos no obtiene respuesta de las autoridades. El caso se encuentra archivado y engavetado hasta que Chacón aparezca. No lo están buscando activamente.
En varias ocasiones la mamá ha solicitado que se investigue a la ex del sospechoso, ya que tienen certeza que ella lo ha ayudado y estuvieron juntos mientras huía, pero la respuesta de la fiscal fue: “Ella está muy protegida, no se puede hacer nada”. Hasta el momento se desconoce su identidad y se desconoce sobre esa protección que evita que la investiguen o interroguen.
Las autoridades en su momento solo emitieron una notificación azul de INTERPOL que significa que están buscando conseguir más información sobre la identidad de una persona, su paradero o sus actividades delictivas en relación con una investigación penal. Luego de casi 3 años, lograron, a través del Fiscal General Tarek William Saab, que emitieran la alerta Roja por Interpol.
Hasta la fecha se desconoce el paradero de Edward Felipe Chacón, se presume que se encuentra en Caracas usando otra identidad o que huyódel país. Se desvaneció dejando una pérdida irreparable para la familia de Carla y sus amigos.
La historia de Carla Ríos es una lección para todos y que su voz siga resonando en la lucha contra la violencia, abuso y acoso en parejas.