Investigadores aseguran que los jóvenes son altos consumidores de redes sociales por lo que es recomendable, bajar su uso para medir la ansiedad, el stress y la depresión en éstos
Según investigadores de la Universidad Estatal de Iowa, Estados Unidos, de reducirse el uso de las redes sociales en adolescentes, también se reduciría la depresión, la ansiedad y la soledad en éstos, tras su alto consumo de IG, TikToc, Snapchat y otros muchos.
La revista Tecnología Mente y Comportamiento, publicó un experimento realizado a 230 estudiantes universitarios a los que se les pidió limitar el uso de las redes sociales por lo menos 30 minutos al día.
Los resultados arrojaron que efectivamente, se había reducido el nivel de stress, ansiedad, depresión en los jóvenes. Los investigadores señalaron que para los chicos, éste reto resultó un desafío, pero a la larga señalaron que podían dormir mejor, lograron obtener mayor concentración y pudieron compartir más con amigos y familiares.
Los investigadores recomiendan entonces, cronometrar el uso de las redes sociales para bajar su consumo y poder atender entonces las otras actividades que también necesitan atención. En el caso de los jóvenes, es esencial calibrar o medir el tiempo en el que se conectan a éstas de manera que puedan relacionarse con el entorno y responder de manera más creativa a las asignaciones diarias escolares.
«Vivimos en una era de ansiedad, muchos indicadores muestran que la ansiedad, la depresión, y la soledad están empeorando y eso puede hacernos sentir impotentes. Pero hay cosas que podemos hacer para controlar nuestra salud mental y nuestro bienestar», señala Douglas A. Gentile, investigador y coautor del estudio.
El resultado es que tanto jóvenes como adultos, deben bajar el consumo de redes sociales para lograr una mayor concentración y optimizar sus funciones diarias en la realidad concreta, que en definitiva es lo que demanda de nosotros el rol social y nuestra productividad como seres humanos.