Es recomendable chequear nuestra salud con exámenes médicos que constaten que estamos preparados para ejercitarnos sin ningún tipo de problemas cardiovasculares o motrices
La Organización Mundial de la Salud, (OMS), recomienda realizar unos 150 minutos de actividad física semanalmente o 75 de manera intensa para los adultos, puesto que la ejercitación constante mejora la salud cardiovascular, la hipertensión y la diabetes.
La actividad física también libera endorfinas que permiten relajarnos y sentir un bienestar general. Si lo hacemos al aire libre y con frecuencia, los beneficios serán mayores.
Si decidimos ejercitarnos a plena luz del día, la vitamina D que obtendremos del sol, nos aportará grandes beneficios, sobre todo para nuestros huesos y músculos, factor que además ayuda a prevenir enfermedades cardiovasculares.
Pese a esto, debemos recordar que protegerse de los rayos solares es fundamental en cualquier época del año, no solo en verano.
Por ello, si realizamos deporte al aire libre, debemos usar crema solar, lentes de sol, sombreros o gorras para evitar tanto quemaduras como daños irreversibles en la piel.
El ejercicio también fortalece el sistema inmunitario, que debemos acompañar con el consumo de frutas, verduras y hortalizas.
Es importante que al iniciar cualquier tipo de entrenamiento busquemos asesoría de especialistas de entrenamiento. Igualmente es recomendable chequear nuestra salud con exámenes médicos que constaten que estamos preparados para ejercitarnos sin ningún tipo de problemas cardiovasculares o motrices.
Para las personas que padecen algún trastorno cognitivo, realizar actividades de forma continuada en el exterior reduce la aparición de la ansiedad, astenia y trastornos conductuales favoreciendo la consciencia y la práctica de la atención plena.
Los espacios naturales al aire libre, a menudo cuentan con menos estímulos visuales y auditivos estresantes que las ciudades, por lo que son ideales para relajarse y dar rienda suelta a la ejercitación.
Permitir a nuestro cuerpo descansar, también es importante para contar con las energías suficientes que nos ayuden a realizar rutinas completas y satisfactorias.