«La trágica muerte del capitán (Rafael) Acosta Arévalo, cuando estaba bajo custodia de las fuerzas de seguridad venezolanas, es un duro ejemplo de ese deterioro continuado de la situación de los derechos humanos», declaró la alta comisionada Federica Mogherini
La Unión Europea (UE) dio un espaldarazo al Informe Bachelet sobre Venezuela y exigió al Ejecutivo de Nicolás Maduro «detener inmediatamente» las «extendidas violaciones de derechos humanos».
«El recientemente publicado informe de la alta comisionada confirma de manera clara y detallada el alcance y la gravedad de las violaciones de los derechos humanos, la erosión del Estado de derecho y el desmantelamiento de las instituciones democráticas en el país», señaló la jefa de la diplomacia de la UE, Federica Mogherini.
Los Veinticho también condenaron la muerte del capitán Acosta Arévalo. «La trágica muerte del capitán (Rafael) Acosta Arévalo, cuando estaba bajo custodia de las fuerzas de seguridad venezolanas, es un duro ejemplo de ese deterioro continuado de la situación de los derechos humanos», indicó Mogherini.
Acosta Arévalo murió, según denunciaron sus familiares y abogados, por las torturas que recibió mientras estaba en poder de la Dirección de Contrainteligencia Militar (Dgcim).
Los Veintiocho respaldaron «firmemente los hallazgos del informe de la alta comisionada de la ONU para los Derechos Humanos» y pidieron al régimen «detener inmediatamente las extendidas violaciones de los derechos humanos».
También que «coopere totalmente» con la Oficina de la alta comisionada y con todos los procedimientos especiales de la ONU para garantizar la implementación de las recomendaciones del informe.
«La UE está dispuesta a asistir a la alta comisionada en sus esfuerzos por garantizar que los derechos fundamentales de todos los venezolanos están completamente protegidos», enfatizó Mogherini.
Incluso, sostuvo que la UE «está lista para comenzar a aplicar medidas específicas para los miembros de las fuerzas de seguridad que participan en la tortura y otras violaciones graves de los derechos humanos».