El Alcalde Chacao hizo un balance económico y político para el fin del año 2022 destacando «la gravedad del desplome económico producto de la inflación que experimenta el pueblo venezolano en estos últimos días. Nosotros apostamos a una decentralización real»
«Hoy somos una vez más en la voz de millones de venezolanos, y los recorridos en todo el país en estos últimos meses y observamos con preocupación lo que observamos con la situación económica del país, sobre todo con el tema inflacionario», denunció Gustavo Duque.
Asimismo agregó que «es probable que estas navidades serán las festividades más tristes de todos los venezolanos. Hoy levantamos la voz por los pensionados, jubilados, maestros y los empleados públicos en todo el país».
«Ese aguinaldo fraccionado ahora no cuenta ni para una cena navideña. Es urgente y necesario rectificar sobre el tema de las política económicas del país. Es necesario que se apueste a la confianza para que los empresarios puedan seguir apostando con garantias y seguridad al país», subrayó.
Desde su punto de vista enfatizó que «es urgente y necesario que venezolano que se encuentre en situación de migrante puede retornar a la nación en condiciones aceptables. Es necesario generar las condiciones para propiciar calidad de vida a los venezolanos que retornen al país.
«De los contrario vamos a seguir viendo pequeñas burbujas que reflejan una pequeña realidad del país, una realidad aparente y circunstancial», reflexionó.
La realidad nacional
«En nuestros recorridos por todo el país, observamos con preocupación que ciertos y determinados municipios a nivel nacional. Nosotros apostamos a una descentralización real». Producto de esta reflexión el dirigente político manifestó la siguiente interrogante: ¿Cómo un alcalde puede pagar salarios y servicios sin recursos propios?
Entre otros elementos consideró que «si Venezuela sigue por el mismo camino del desplome económico, los vecinos de los municipios van a perder la esperanza de hacer posible los cambios que país demanda en términos generales».
«La diáspora que observamos en el sector público es preocupante, pero comprensible con la falta de motivación de la gente en hacer posible los cambios que demanda toda la nación. En este país ninguna persona puede trabajar por 20 o 40 dólares al mes», enfatizó.
“Ahorita el simple hecho de comprar una desmalezadora acaba con el presupuesto mensual de cualquier alcaldía en el interior del país”, precisó.
Para concluir el dirigente político «propone que se estudie la posibilidad de cancelar una bonificación especial al final de este año para así poder generar la esperanza de cambio que demanda todos los venezolanos. Seguiremos sin la voz de todo el pueblo nacional».