Para el historiador no sé puede establecer una relación entre la situación actual de Venezuela y proceso de independencia, ya que “no hay duda que fue un proceso heroico que dio origen a nuestro desarrollo Republicano, y que abarca un periodo prolongado de tiempo”
Este lunes 5 de julio, el político, historiador y exmiembro del Consejo Nacional Electoral, Rafael Simón Jiménez aseguró a Contrapunto que para un país ser realmente independiente tiene que tener pleno ejercicio de su soberanía en todos los ámbitos.
“Un ejemplo sería la guerra de independencia, nos permitió liberarnos del control y la subordinación al imperio Español, pero seguimos siendo por ejemplo dependientes en lo económico”, dijo.
En ese sentido, afirmó que actualmente pudiéramos poner en duda que el gobierno venezolano “tenga plena autonomía a la hora de la toma de decisiones, dada su alineación con gobiernos como el de China y Rusia, y más marcadamente de Cuba, que practican la intromisión en unos casos”.
Para el historiador no sé puede establecer una relación entre la situación actual de Venezuela y el proceso de independencia, ya que “no hay duda que fue un proceso heroico que dio origen a nuestro desarrollo Republicano, y que abarca un periodo prolongado de tiempo”.
“A lo largo de cuyo proceso, el país ha recorrido diversas etapas hasta la realidad de hoy, pero sin duda nuestro proceso de independencia forma parte de uno de los mejores capítulos de nuestra historia”, aseveró.
¿Pero a doscientos años de la independencia de Venezuela hay similitudes de aquel país al que tenemos este año? Jiménez explicó que los procesos políticos e históricos “no son comparables”, ya que cada uno de ellos depende del contexto y las condiciones concretas, de allí que no pueda establecerse paralelismos o puntos de comparación entre dos procesos.
“La independencia involucra en lo político plena soberanía para la toma de decisiones sin interferencias, ni tutelas de terceros; en lo económico involucra la libre disposición de sus recursos y la posibilidad de emprender procesos de desarrollo defendiendo sus propios intereses, sin permitir la tutela o el control de terceros, la independencia política y la soberanía económica son los componentes de la verdadera autonomía”, sentenció el historiador.