Una avería dejó sin el servicio a más de mil usuarias y usuarios desde octubre de 2022. Mujeres que vieron a sus familias fragmentarse por la migración se encuentran hoy sin comunicación
Eran en su mayoría mujeres, adultas mayores, la que este jueves 16 de febrero salieron a la puerta del edificio Darijak, en la parroquia Candelaria. Antes de las 10 de la mañana se reunieron con pancartas y con la decisión de que las escucharan. Desde octubre de 2022 se quedaron sin telefonía fija y sin internet.
Parece un detalle menor, pero esa es la vía que tienen para comunicarse con sus hijos y nietos en el exterior; también, para trabajar y para ratificar que están vivas y con muchos años por delante. Son habitantes de la Candelaria Norte, avenida Panteón, algunas zonas de San Bernardino.
«Yo no trabajo con internet, pero tengo a mi hijo fuera del país, y necesito el internet para comunicarnos. Ahora uso datos, pero es carísimo», se queja Tania Ortega, vecina de la zona.
El reclamo de María Elena Fernández se leía claramente en el cartel que colgaba de su cuello: «Tengo 150 días incomunicada sin línea Cantv, sin internet. Auxilio».
-¿Usa mucho el teléfono?
-Uso mucho el teléfono Cantv. También internet. Mi hija vive en San Antonio de Los Altos, y cuando venía, trabajaba. Ahora no ha podido.
-¿Qué explicación ha tenido?
-Pues nada. Hemos ido a Cantv y no nos han dado solución.
-¿Qué van a hacer?
-Será ir otra vez a Cantv, cerrar calles. No sé. Así no podemos seguir. Estoy incomunicada completamente con la familia que está en el exterior. Toda mi familia está fuera. Solo tengo una hija.
Las ha acompañado en su lucha el dirigente social Carlos Julio Rojas, presidente del Frente en Defensa del Norte de Caracas.
«Al final estamos completamente incomunicados. No sirve el teléfono ni el internet».
«Soy usuario y afectado por el problema con Cantv. No tenemos internet desde octubre. Lo cortaron aparentemente por una falla en un cable», detalló Eduardo Pulido, residente desde hace 17 años.
En una sola cuadra hay seis edificios afectados. «Son unos 1.200 usuarios de Candelaria Norte». Han llevado cartas a la Cantv, han recogido firmas «y no hemos tenido una respuesta eficiente», salvo promesas que no se cumplen. «Puro cuento».
Pulido vive del teletrabajo. No tener internet desde el 10 de octubre -recuerda la fecha con precisión- ha convertido su día a día en un camino de espinas. «Tengo que recurrir a familiares que no viven en la parroquia, para que me presten un computador. No tengo cómo pagar los datos, no genero ese dinero», explica. Tampoco puede pagar los 60 o 70 dólares del servicio que ofrecen empresas particulares.
Carpeta en mano Tania Ortega relata las gestiones que han realizado: una carta entregada en los primeros días de noviembre «que a duras penas nos la recibieron», una visita a la oficina de Cantv en el Centro Comercial Ciudad Tamanaco en la cual le notificaron que había 2.500 usuarios afectados y le prometieron resolverlo. El 8 de febrero hicieron una asamblea con el apoyo de Carlos Julio Rojas. Se meten en los chat de prensa de Cantv, han buscado que su voz se escuche. Lo que las misivas no consiguieron lo resolvieron la protesta y las consignas. «Vinieron dos guardias nacionales, muy atentos, y nos dijeron que van a reportarle al comandante el problema, y que buscarían que se acerque alguien de Cantv».
La próxima semana celebrarán una nueva asamblea de vecinos. Si no hay respuesta, las mujeres de la zona llevarán su reclamo a la propia sede de la Cantv.