Las fuerzas estadounidenses interceptaron y decomisaron un petrolero sancionado frente a las costas de Venezuela, según reportó Bloomberg y confirmaron medios como CNBC y USA Today. El hecho ocurrió este miércoles 10 de diciembre de 2025 y marca un nuevo episodio en la escalada de tensiones entre Washington y el gobierno de Nicolás Maduro.
Contexto de la operación
De acuerdo con fuentes citadas por Bloomberg, la acción fue ejecutada por fuerzas estadounidenses en aguas cercanas a Venezuela, en el marco de la política de sanciones que busca limitar las exportaciones de crudo del país caribeño. El buque, cuyo nombre no ha sido revelado, estaba bajo sanciones previas de Washington.
La operación se produce tras meses de despliegue militar estadounidense en el Caribe, con el objetivo de presionar la salida de Maduro del poder. El presidente Donald Trump declaró recientemente que los “días de Maduro están contados” y no descartó una intervención más amplia en la región.
«Les paramos el embarque petrolero más grande de la historia». Están muy desesperados. No solo cae la droga. Estás sin flujo de caja, no money», aseguró Trump.
Impacto en los mercados
La noticia tuvo un efecto inmediato en los mercados energéticos: el precio del crudo estadounidense (WTI) subió 0,48% hasta los 58,53 dólares por barril, mientras que el Brent aumentó 0,5% hasta los 62,25 dólares. Analistas advierten que la medida podría generar mayor cautela entre navieras y compradores de crudo venezolano, que ya enfrenta restricciones para colocar su producción en el mercado internacional.
Venezuela y sus reservas estratégicas
Venezuela, miembro fundador de la OPEP, posee las mayores reservas probadas de petróleo del mundo, superiores incluso a las de Arabia Saudita. Según datos de la consultora energética Kpler, el país exporta actualmente unos 749.000 barriles diarios, de los cuales al menos la mitad se dirige a China, mientras que cerca de 132.000 barriles por día aún llegan a Estados Unidos.
Escalada regional
La administración Trump ha intensificado en las últimas semanas su ofensiva contra el chavismo, con operaciones militares en el Caribe y ataques a embarcaciones acusadas de narcotráfico. El decomiso del petrolero sancionado se interpreta como un paso más en la estrategia de aislar económicamente al gobierno de Maduro y limitar sus fuentes de financiamiento.






