El empresario es respaldado por el Gobierno de Nicolás Maduro ante las autoridades de los Estados Unidos
La detención del empresario Alex Saab, en Cabo Verde, desata un nuevo forcejeo internacional en donde intervienen Venezuela, sus aliados internacionales y los Estados Unidos.
Reportes de agencias internacionales indican que al aterrizar en la isla africana el avión privado en que viaja Saab -con la intención de una escala técnica- se dispararon las alarmas, ya que Estados Unidos hace un seguimiento de cerca al empresario.
En territorio estadounidense es acusado de delitos como conspiración, lavado de activos y enriquecimiento ilícito en nueve países. De ser encontrado culpable, podría cumplir una condena de hasta 20 años de cárcel.
Estados Unidos y Cabo Verde no tienen tratado de extradición, así que esto complica las negociaciones.
Por su parte, la cancillería dirigida por Jorge Arreaza aseguró que Saab es un agente del Gobierno de Maduro, que se encarga de gestionar alimentos para el país y superar los «obstáculos de las sanciones».
Se indica que Maduro solicitó la ayuda al Gobierno de Putin lo que hizo que el proceso de traslado hacia los Estados Unidos fuera abortado y ahora el caso se encuentra en medio de una trama de debates geopolíticos y de forcejeo internacional.
El gobierno estadounidense acusa a Saab de ser testaferro de Maduro en negocios reñidos con la Ley y la ética, y sostiene que está vinculado a una red de narcotráfico, lavado de dólares y adjudicación fraudulenta de millonarios contratos oficiales.
Existe mucha información cruzada. Hay quienes afirman que ya está en vuelo hacia Miami porque agentes federales ya lo estaban esperando, sin embargo, hay otras versiones que indican que están en un momento de negociaciones diplomáticas y la de nuevo la geopolítica toca la situación venezolana.