El representante indígena de la ONG denunció que estas comunidades huyeron del país desde febrero luego de varios enfrentamientos con fuerzas de seguridad del Estado durante protestas en contra de Maduro
La organización no gubernamental Foro Penal denunció que al menos 900 indígenas pemones de 14 comunidades han tenido que desplazarse hacia localidades rurales de Brasil, especificamente en Boa Vista, para escapar de presunta persecución del Gobierno de Nicolás Maduro.
«Más de 900 indígenas pemones han sido desplazados hasta Brasil producto del miedo, de la amenaza que tienen», dijo Olnar Ortiz, coordinador de pueblos indígenas de la ONG.
Según Ortiz, del total de desplazados, 800 se afincaron en el asentamiento brasileño de Tarau Peru, que pertenece a la misma comunidad y donde incluso tienen familiares. Los restantes 100 se repartieron entre los poblados de Bananal y Sakau Mota, también en Brasil.
Todos escaparon de Venezuela después de los enfrentamientos con fuerzas de seguridad, en las que fallecieron 7 personas, 4 de ellas pemones, el pasado 22 de febrero, una día antes de que la oposición intentara ingresar ayuda humanitaria al país y que aún se acopia en la frontera con Brasil.
Ortiz añadió que entre el 22 y 28 de febrero 62 personas fueron detenidas por allanamientos y por tener videos y fotos de las protestas en sus celulares y 57 personas resultaron heridas por armas de fuego.
El abogado indicó que los indígenas llegaron a estos lugares en calidad de refugiados y que al menos el 40% de ellos son menores de edad.
De igual manera, lamentó que estas personas hayan tenido que desplazarse de sus comunidades donde, explicó, se sustentaban «a pesar de la crisis» con actividades turísticas.
Ortiz insistió en que el tema de la ayuda humanitaria solo complementó las violaciones a los derechos humanos de los pemones. Dijo que desde 2006 los indigenas se han resistido a la explotación ilegal del oro en el municipio Gran Sabana.
El representante indígena de Foro Penal denunció que estos hechos han creado traumas en los niños de las comunidades, como evidencia mostró un dibujo que realizó uno de los infantes, durante una actividad junto a los miembros de la misión de Organización de Naciones Unidas (ONU), en el que representó a un funcionario apuntando a un indígena con un arma.
El presidente de la Asamblea Nacional, Juan Guaidó, hizo del ingreso de ayuda humanitaria una prioridad de su Gobierno interino y a finales de febrero pasado adelantó una operación en las fronteras con Colombia y Brasil que derivó en enfrentamientos con las autoridades y se saldó con siete indígenas muertos del estado sureño de Bolívar, aseguró hoy Ortiz.
El pasado enero Nicolás Maduro juró un nuevo mandato que no reconoce la oposición y parte de la comunidad internacional y, en respuesta, Guaidó proclamó un Gobierno interino que cuenta con el respaldo de más de 50 países.