Trabajadores de varias estaciones de Caracas reportaron que este martes fueron abastecidas con normalidad, mientras que varios usuarios decidieron pasar previendo que haya más apagones
El señor Daniel, bombero de la estación de servicios de El Rosal, dice que el día ha estado «regular», con respecto a la afluencia de personas que han llegado a la «bomba» a surtir sus vehículos de gasolina luego de que este lunes el país volviera a quedar sin suministro eléctrico por sexta vez en 2019.
El trabajador aclara que este martes, la estación fue abastecida de forma normal. «La gandola llegó como todos los días», dijo Daniel, quien cuenta que fue a su trabajo, desde los Valles del Tuy, gracias a que consiguió una camioneta de pasajeros que lo dejó en Plaza Venezuela.
Para el mes de mayo, se registró desabastecimiento de combustible en gran parte del país. Fotos y videos de largas colas de vehículos en estaciones de servicio de varias ciudades fueron constantemente replicadas en redes sociales.
Según voceros de oposición, la escasez de gasolina de mayo se debió a una disminución en la producción de petróleo y a que las plantas refinadoras del país están trabajando por debajo de su capacidad, mientras que el gobierno de Nicolás Maduro la atribuyó a las sanciones impuesta por Estados Unidos.
José llegó a la estación ubicada en la principal de Las Mercedes, desde La California, para abastecer su carro de gasolina, a pesar de que, dice, le quedaba «alguito en el tanque», pero aclara que también lo hace porque «no se sabe lo que pueda pasar» en el país».
En horas de la tarde, la estación de servicio Tamanaco, cerca del centro comercial Paseo Las Mercedes, estuvo cerrada por unos minutos mientras una gandola la abastecía de combustible, por segunda vez en el día. Neglis, trabajadora de la estación de servicio, explica que el día ha estado «fuerte», debido a que las personas saben que, cuando hay cortes eléctricos, dicha estación cuenta con planta eléctrica.
En la estación de Caurimare, la cola de vehículos, para horas de la tarde de este martes, era con cierta afluencia, pero avanzaba con rapidez. Carlos, quien trabaja allí, describe el día como «buenísimo», aunque también considera que ha estado «normal», para lo ocurrido ayer con el apagón.
«La gandola que viene todos los días, llegó hoy como a las 11 de la mañana», añadió Carlos.
José Merchán aprovechó que trabaja cerca de la estación de servicio Caurimare para llenar el tanque porque sabía que tenía poco combustible, y previendo que se incrementen los apagones. Cuenta que ayer, durante el corte eléctrico, tuvo que tomar caminos verdes para llegar a su casa, en Palo Verde, debido a la congestión en las calles.