«No sabemos cómo el gobierno de Maduro va a explicar que Emilio Negrín estuvo en la primera ronda de diálogo con la OIT y para esta segunda ronda lo tiene preso», aseveró su abogado defensor, Eduardo Torres
Palabras más, palabras menos, el abogado Eduardo Torres, defensor de derechos humanos e integrante de la Coalición Sindical Nacional, comentó este martes que no sabe cómo el gobierno de Nicolás Maduro les explicará a los enviados de la Organización Internacional del Trabajo (OIT) que el sindicalista Emilio Negrín, que se reunió con ellos en abril pasado, hoy está preso en la sede de la PNB en La Yaguara y no podrá participar en la nueva ronda, prevista para el 28 de septiembre.
Negrín, presidente de la Federación de Trabajadores Tribunalicios, es integrante de la central sindical Codesa. Lo detuvieron en la madrugada del 5 de julio en el contexto de lo que defensores de derechos humanos han reportado como una razzia represiva que se cerró con un saldo de seis activistas presos. En ese momento el presidente del Sindicato de Trabajadores de la UCV (Sinatra-UCV), Eduardo Sánchez, consideró que esto formaba parte de una política de amedrentamiento y reportó más de 200 trabajadores detenidos «por pelear los derechos de la clase trabajadora, los derechos consagrados en la Constitución y en la ley del trabajo».
Durante el diálogo con la OIT, hace cinco meses, Negrín resaltó que mientras dirigentes sindicales protestaban en las calles cercanas al sitio de las reuniones (hotel Renaissance), otros dirigentes lo hacían frente al gobierno «y con la garantía de la Organización Internacional del Trabajo».
Incluso, en declaraciones a los medios de comunicación, Negrín se refirió a los trabajadores encarcelados o perseguidos por el sistema de justicia. «No solamente estamos pidiendo la ratificación de estos compañeros en sus puestos de trabajo, sino salarios caídos», indicó en ese momento.
El dirigente sindical aclaró en ese momento que no había acuerdos definitivos con el gobierno, más allá de lo que el gobierno esperaba lograr con el encuentro.
Cinco meses después es el propio Negrín el que está preso y sin perspectivas claras de salida. El 26 de septiembre debe celebrarse la audiencia preliminar de juicio en el Tribunal Cuarto de Terrorismo de Caracas.
«No sabemos cómo el gobierno de Maduro va a explicar que Emilio Negrín estuvo en la primera ronda de diálogo con la OIT y para esta segunda ronda lo tiene preso», aseveró Torres.
Para dirigentes gremiales lo que ha ocurrido con Negrín forma parte de una política desde el poder. El gobierno, apuntó Eduardo Sánchez, «está violentando los derechos humanos de los trabajadores», con acciones como el memorándum 2792 que «cercenó derechos y liquidó las contrataciones colectivas en 2018». Este año, el instructivo de la Onapre «liquidó entre 60% y 70% del salario de los trabajadores».
En ese momento se formalizó ante la OIT la denuncia del caso Negrín, instancia que -como lo precisó Sánchez- recibió el planteamiento. Esta semana, que ha sido calificada por Eduardo Torres como decisiva, los defensores y los familiares de los luchadores presos siguen tocando otras puertas.