El sector funerario ha tenido limitaciones para abastecerse con combustible y «hemos tenido que pasar muchas necesidades para el traslado de los cuerpos a las funerarias y crematorios», informó Joel Urribarri, director de la cámara nacional de empresas funerarias y afines.
En semanas anteriores tuvieron que pagar gasolina a 3 dólares el litro o pedir gasolina a los deudos de las personas fallecidos.
Los protocolos de despedida se mantienen si no es COVID-19, y hay 22 crematorios operativos, destacó en entrevista este jueves con Unión Radio.
Urribarri informó que el traslado entre ciudades solo está permitido si no son casos COVID-19.