Diplomáticos y politólogos señalaron que las sedes diplomáticas son inviolables y que se trata de otra agresión a la soberanía de Venezuela a manos del Servicio Secreto de Estados Unidos, por lo que pone en riesgo a todas las embajadas del mundo
Tras la irrupción de funcionarios de la Policía Metropolitana de Washington a la embajada de Venezuela en esa ciudad para entregar un documento de desalojo, diplomáticos se pronunciaron al respecto reiterando que se trata de una violación de la Convención de Viena y del Derecho Internacional.
A través de las redes sociales se pudo conocer que los funcionarios policiales irrumpieron en la embajada tras partir los candados de las puertas para entregar un documento de desalojo, sin ninguna firma, a los activistas que están dentro de la sede desde mediados de abril.
Ante esto, el canciller venezolano Jorge Arreaza, a través de su cuenta en la red social Twitter, exigió al gobierno de Estados Unidos que cumpla con la Convención sobre Relaciones Diplomáticas, proteja la embajada en Washington y respete los derechos humanos de los activistas.
Arreaza avaló también varias opiniones acerca del tema, como el hecho de que la entrada del cuerpo policial a la sede diplomática en Washington establece un precedente «y pone en riesgo a todas las embajadas del mundo».
Arreaza también apoyó lo dicho por la periodista de Telesur, Karina Cartagena: «Las sedes diplomáticas gozan de un estatuto especial: Son inviolables. Las fuerzas de seguridad de un país no pueden entrar en un recinto que goce de protección diplomática en ninguna circunstancia».
Por su parte, el embajador de Venezuela ante la Organización de las Naciones Unidas (ONU), Samuel Moncada, escribió en su cuenta de la red social Twitter: «Si un gobierno utiliza en su territorio agentes pagados y protegidos para ocupar y violar los locales diplomáticos de otros gobiernos, el principio de inmunidad se destruiría y todos los locales diplomáticos estarían en peligro. Sería la ley de la selva».
Por otro lado, el sociólogo, politólogo, catedrático y escritor argentino Atilio Borón también se refirió a la irrupción policial como una violación a la Convención de Viena.
El politólogo William Serafino advirtió que, con esta irrupción de la policía norteamericana, fue agredida la soberanía de Venezuela a manos del Servicio Secreto de Estados Unidos.
Hasta el cierre de esta nota, se conoció que los funcionarios policiales se retiraron inmediatamente, luego de entregar la orden de desalojo, y los activistas aún permanecen dentro de la sede diplomática venezolana en Washington.