El virus deja ya en China continental 2.236 muertos y ha contagiado a más de 75.000 personas, mientras que en otras partes del mundo ha causado 11 muertos y 1.100 contaminados.
La Organización Mundial de la Salud (OMS), advirtió este pasado viernes que el tiempo para erradicar el nuevo coronavirus «se estrecha» y que está preocupada por la aparición de casos sin «vínculo epidemiológico claro» fuera de China.
Los nuevos brotes de la enfermedad se multiplican: dos muertos más en Irán, primer contagio en Líbano, duplicación de casos en Corea del Sur y unos 500 prisioneros contaminados en China.
Señal del nerviosismo, unas diez localidades del norte de Italia cerraron este pasado viernes bares, escuelas, centros deportivos y otros lugares públicos, tras detectar 17 casos de contagio en todo el país.
La «ventana de oportunidad» para erradicar la epidemia «se está estrechando», advirtió el director de la OMS, Tedros Adhanom Ghebreyesus, quien pidió a la comunidad internacional actuar «rápidamente» y lamentó la falta de apoyo financiero.
El virus deja ya en China continental (sin incluir Hong Kong y Macao) 2.236 muertos y ha contagiado a más de 75.000 personas. En otras partes del mundo, 11 muertos y 1.100 contaminados.
«Aunque el número total de casos fuera de China sigue siendo relativamente escaso, estamos preocupados por la cantidad de casos sin vínculo epidemiológico claro, como los antecedentes de viaje o los contactos con un caso confirmado», explicó.
«Vemos que la situación evoluciona. No solo aumenta el número de casos, sino que también vemos diferentes modelos de transmisión», afirmó Sylvie Briand, directora del Departamento de Gestión de Riesgos Infecciosos de la OMS.
Como señal de su preocupación, la OMS anunció la designación de seis enviados especiales, entre ellos, David Nabarro, ex coordinador para el ébola durante la epidemia en África occidental entre fines de 2013 y 2016.
Más casos fuera de China
Aunque el número de nuevos casos diarios en China, bajó durante cuatro días consecutivos, volvió a crecer con 889 frente a los 673 del día anterior, anunció el viernes la Comisión Nacional de Salud.
China, estableció una cuarentena de facto para decenas de millones de personas en la provincia de Hubei (centro) y en su capital Wuhan, epicentro de la epidemia.
Varios países prohibieron la entrada de viajeros provenientes de China y muchas aerolíneas suspendieron sus vuelos al país. Pero estas restricciones no han impedido la aparición de nuevos casos fuera de China continental.
Irán anunció el viernes 13 de febrero nuevos casos de contagio y la muerte de otras dos personas, para un balance total de cuatro decesos y 18 el de infectados. La mayoría de casos en la ciudad de Qom (150 km al sur de Teherán).
En Corea del Sur, el número de casos prácticamente se duplicó este pasado viernes, elevándose a más de 200. Entre ellos, unos 120 son miembros de la «Iglesia de Jesús Shincheonji», una secta cristiana situada en la ciudad de Daegu (sureste).
Israel y Líbano, confirmaron un caso cada uno: una israelí que acababa de regresar y una libanesa de 45 años, que había viajado a Qom.