La manifestación fue convocada a través de foros de internet. Portaban carteles en los que se podía leer: «Juntos, en pie», «No a la extradición a China» o «Carrie Lam, dimisión»
Decenas de miles de hongkoneses participaron este domingo en la primera manifestación desde el asalto al Parlamento del pasado lunes, una protesta que concluyó sin incidentes en la estación de tren de alta velocidad que conecta con Pekín y otras ciudades chinas, fuertemente custodiada por la policía.
La marcha -que según los organizadores reunió a 230.000 personas- fue también la primera desde que comenzaron las protestas, el pasado 12 de junio, convocada en el distrito de Kowloon, la zona peninsular y comercial de la ciudad, frecuentada por turistas chinos.
El destino de la manifestación hizo temer que se produjeran incidentes ya que la estación de ferrocarril de alta velocidad, muy contestada cuando se construyó, es uno de los principales símbolos de la presencia china en la ciudad al hacer de frontera con la China continental en el centro de Hong Kong y estar vigilada por la policía de Pekín.
Cerca de 1.500 policías permanecieron en estado de alerta y la estación fue rodeada con grandes barreras de plástico rellenas de agua para impedir que se acercasen los manifestantes, que rechazan la aprobación de una ley que permitiría la extradición a China.
Decenas de policías se situaron delante de las vallas y cientos de agentes antidisturbios en el interior de la estación para reforzar el dispositivo de seguridad.
Los organizadores de la manifestación recalcaron, sin embargo, que se trataba de una marcha pacífica, pese a que algunos grupos a través de la aplicación de mensajería Telegram habían llamado a «tomar» la instalación ferroviaria.
La manifestación no fue esta vez organizada por el Frente Civil de Derechos Humanos, convocante de las anteriores, sino que se puso en marcha a través de foros de internet.
Los manifestantes, en su mayoría vestidos de negro, portaban carteles en los que se podía leer: «Juntos, en pie», «No a la extradición a China» o «Carrie Lam, dimisión».
También había muchos mensajes que pedían amnistía y perdón para las 17 personas detenidas hasta el momento por el asalto al Parlamento y los enfrentamientos anteriores y posteriores.
Junto a multitud de jóvenes, también caminaban hoy en la manifestación bastantes adultos y familias con niños.
Al concluir la manifestación, centenares de jóvenes se dirigieron a la zona más turística de Kowloon, donde cortaron algunas calles y se registraron conatos de enfrentamientos con la Policía.