El presidente brasileño, Jair Bolsonaro, afirmó este lunes que las relaciones entre Brasil y los países de la Liga Árabe están en su mejor momento y anunció nuevos frentes de diálogo para poder elevar tanto el intercambio comercial como las inversiones entre ambas partes.
El jefe de Estado destacó la «especial relación» entre Brasil y los países árabes y el «enorme potencial» para el comercio entre ambas partes en la apertura del Fórum Económico Brasil-Liga Árabe, evento que se extenderá hasta este martes y es realizado de forma virtual por la pandemia del coronavirus.
El líder ultraderechista destacó la «aproximación en el campo político» entre Brasil y los países árabes casi dos años después de haber generado la fuerte desconfianza de la Liga Árabe y de sus miembros, cuando anunció su intención, aún como candidato presidencial, de transferir la embajada de Brasil en Israel desde Tel Aviv hasta Jerusalén.
El militar de la reserva brasileña e importante aliado del primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, hasta ahora no ha cumplido esa promesa ni ha vuelto a referirse a ella, y, por el contrario, ha impulsado las relaciones con los árabes, importantes compradores de alimentos brasileños, principalmente carnes, incluso con una visita a Arabia Saudí, Catar y Emiratos Árabes Unidos.
En la apertura del Fórum también participaron el secretario general de la Liga Árabe, Ahmed Abu Al Ghait; el ministro de Exteriores y Cooperación Internacional de Marruecos, Nasser Bourita; el ministro de Relaciones Exteriores de Bahrein, Abdulatif bin Rashid al Zayani, y el ministro de Relaciones y Cooperación Internacional de Emiratos Árabes Unidos, Ahmed Ali Al Sayegh.
Según el presidente de la Cámara de Comercio Árabe-Brasileña, Rubens Hannun, durante el Fórum serán suscritos varios acuerdos, entre los cuales, uno que establece rutas marítimas directas entre puertos brasileños y árabes, y otro para facilitar los intercambios comerciales.
«Tenemos que aprovechar el enorme potencial que aún hay para ser explotado en los más diversos sectores y abrir nuevas frentes de diálogo, cooperación y trabajo por la prosperidad de nuestras naciones», aseguró Bolsonaro en un pronunciamiento en el que estuvo ladeado por sus ministros de Relaciones Exteriores, Ernesto Araújo, y de Economía, Paulo Guedes.
El mandatario dijo estar convencido de que la relación entre ambas partes «está en su mejor momento» y lo atribuyó en parte a la importante presencia de inmigrantes de países árabes en Brasil.
Según Bolsonaro, en los diferentes encuentros y conversaciones que ha tenido con jefes de Estado o de Gobierno de países árabes ha trabajado por impulsar una «agenda volcada a resultados» y tales esfuerzos fueron compartidos por Arabia Saudí, que el año pasado anunció inversiones por 10.000 millones de dólares en Brasil.
Agregó que los esfuerzos conjuntos permitieron la creación en los últimos meses de un comité interministerial bilateral para desarrollar proyectos de promoción de comercio de inversiones entre Brasil y Arabia Saudí.
«Nuestra aproximación en el campo político nos permitió encontrar nuevos sectores de cooperación en sectores estratégicos, como en ciencia, tecnología, innovación y energía», afirmó.
El intercambio comercial entre Brasil y los países árabes sumó 11.200 millones de dólares el año pasado y el crecimiento se mantuvo en 2020 incluso con la pandemia.
«Con las restricciones, los encuentros virtuales se multiplicaron», dijo el mandatario.
El gobernante afirmó que Brasil también pretende aprovechar la moderna infraestructura de los países del Golfo para «diversificar y expandir el acceso de productos brasileños a los demás mercados de Asia».
Bolsonaro recordó que al menos 30 empresas brasileñas tienen oficinas y unidades productivas en Oriente Medio, y que Emiratos Árabes Unidos, Catar y Kuwait son importantes inversores en Brasil.
Agregó que su Gobierno ya adoptó medidas para garantizar el crecimiento económico sustentable pospandemia y dijo que las reformas que impulsa en el Congreso, como la administrativa y la tributaria, servirán para generar un ambiente totalmente seguro para las inversiones extranjeras en Brasil.
Afirmó que Brasil exporta una amplia gama de productos para todos los 22 países de la Liga Árabe, principalmente agropecuarios, y dijo que las exportaciones de alimentos a los árabes entre enero y agosto de este año sumaron 4.600 millones de dólares aún con la pandemia, con lo que se acercaron a las de todo el año pasado (4.900 millones de dólares).
Con diferentes cifras, Bolsonaro destacó a Egipto como el principal destino de las exportaciones brasileñas a África y el segundo mayor en la Liga Árabe; a Marruecos como importante abastecedor de fertilizantes de Brasil, y a Argelia como principal origen de las importaciones brasileñas procedentes de África y tercer mayor destino de exportaciones a países árabes.