«Comunismo o libertad» proclama el partido conservador, haciendo uso del recurso de la crisis venezolana. Casi 60.000 migrantes criollos residen actualmente en esta ciudad europea que este 4 de mayo celebra sus comicios locales.
Envuelta en polémicas estuvo toda la campaña electoral por la gobernación de Madrid. Desde la renuncia del vicepresidente español Pablo Iglesias, hasta el hallazgo de cartas amenazadoras en contra del exmandatario José Luis Rodriguez Zapatero. Por esta característica, no supone una sorpresa que la crisis de Venezuela haya sido un tema a discutir.
Cada vez son más los venezolanos que llegan para instalarse en el territorio que en algún punto histórico fue «La Corona». Esta situación incide directamente en el clima político de la región, puesto que se cree que esta comunidad puede representar una fuerza significativa en los venideros sufragios.
Tanto es así que Isabel Díaz Ayuso, quien compite por la reelección en el cargo de presidenta autónoma de Madrid con el Partido Popular (PP), acuñó el lema «Comunismo o libertad». Su estrategia es clara, asociar la crisis multidimensional venezolana con el posible triunfo de la izquierda política, representada por el Partido Socialista español.
Diversas personalidades públicas venezolanas, quienes salieron del territorio por oponerse al gobierno de Nicolás Maduro, se han pronunciado. El eurodiputado por el PP Leopoldo López Gil, padre del dirigente de Voluntad Popular del mismo nombre, aseguró a EFE que «los venezolanos en Madrid somos amigos de todo lo que signifique democracia y si eso está en la derecha, pues estará».
Asimismo, explicó que sus compatriotas están abiertos a entender que es en el centro y no en los extremos, donde se encuentra el estado de derecho y el bienestar del pueblo. Básicamente, e indicó que su apoyo está en la opción que suponga la libertad, la justicia y la democracia.
En la misma posición de equiparar comunismo con anti-libertad se encuentra Antonio Ledezma. El exalcalde comentó que se trata de «hacer un deslinde con el populismo que engendra miseria y desgracia».
Bajo la misma idea, reflexionó sobre lo indecente que sería que un seguidor de la ideología izquierdista justifique al régimen de Venezuela, señalando que esto es «confundir la izquierda con el narcotráfico y con el terrorismo internacional».
Ledezma, quien pudo escapar en 2017 de su arresto domiciliario por motivos políticos, aprovechó su experiencia como alcalde de la urbe caraqueña para expresar sus deseos de no ver a Madrid en la misma situación.
«No quiero que el metro acabe siendo como el de allí, ni ver a los madrileños buscando agua en los ríos, ni que los hospitales colapsen, ni que se convierta en una zona delincuencial», puntualizó.
De los 62.825 migrantes venezolanos en territorio español, 59.000 se encuentran en Madrid y muchos pueden votar en estos comicios regionales ya que poseen doble nacionalidad.
EFE recopiló los testimonios de varios integrantes de la comunidad latinoamericana en Madrid. Una de ellas es Rebeca, emigrante desde la llegada a la presidencia de Hugo Chávez, quien considera que hay «un total rechazo a la corriente de derecha y demasiado gusto por la izquierda socialista» en España.
Rebeca asocia al franquismo español con el socialismo venezolano y asume que se han presentado situaciones negativas. Según la entrevistada, esto «implica que todo extremo trae consigo excesos que acaban con las democracias”.
No todos piensan igual con respecto a las consecuencias del comunismo; Belén, joven cubana, asegura que votará por los partidos de izquierda debido a sus orígenes. Jessica, de Colombia, indicó que votará por el cambio necesario tras más de dos décadas de gobierno de derecha, en manos del PP.
Las más recientes encuestas indican que la presidencia autónoma se mantendrá bajo el mismo partido derechista puesto que, según proyecciones, los adversarios (Partido Socialista Obrero Español, Más Madrid y Unidos Podemos) no lograrían los números necesarios para posicionarse como la alternativa ganadora.