La experimentación se efectuará en el Instituto Nacional de Enfermedades Infecciosas Lazzaro Spallanzani, en Roma
Italia comenzará este lunes, 24 de agosto, la aplicación en humanos de la vacuna contra el coronavirus, creada y producida en ese país. Miles de personas acudieron a la convocatoria de búsqueda de voluntarios (solo la semana pasada fueron 5.000), pero finalmente serán 90 quienes sean sometidos a las pruebas.
La vacuna, creada, producida y patentada por la empresa biotecnológica italiana ReiThera, con sede en Castel Romano, ya superó las pruebas preclínicas realizadas tanto in vitro como en animales.
De acuerdo con las autoridades de la región del Lazio, los primeros resultados han puesto de relieve una fuerte respuesta inmunitaria y un buen perfil de seguridad.
Los cinco primeros voluntarios son hombres, de entre 31 y 46 años, que ya se han practicado los exámenes médicos preliminares y han probado su idoneidad. Se les inyectará la vacuna y si no se observan efectos adversos significativos pasarán al siguiente grupo de voluntarios, que recibirá una dosis mayor. La segunda ronda estña prevista realizarse entre el 7 y el 9 de septiembre.
Los 90 voluntarios elegidos se dividen en dos grupos de edad: 45, entre 18 y 55 años y el mismo número, entre 65 y 85 años. Cada grupo se dividirá en tres subgrupos de 15 personas, cada una de las cuales recibirá una dosis diferente de vacuna.
Durante la fase 1, a cada uno de los voluntarios se le inyectará una dosis de vacuna, y posteriormente cada paciente será sometido a siete controles, los dos primeros días después de la vacunación, el último a las 24 semanas. Muchos voluntarios son médicos, factor que ha despertado sentimientos de gran aprobación en las autoridades sanitarias.
Si los resultados de esta fase son positivos, la fase 2 podría comenzar en otoño con un mayor número de voluntarios, tanto en Italia como en otros países.