El módulo de ascenso desde la Luna y el de regreso se acoplaron con éxito al de órbita, que se había mantenido girando alrededor del satélite mientras el resto de los componentes recogían las muestras lunares
La sonda china Chang’e 5 emprendió este domingo 13 de diciembre su regreso hacia la Tierra con un cargamento de unos dos kilogramos de roca lunar, informó la Administración Nacional del Espacio del país asiático (ANEC).
En un comunicado publicado en su página web, la ANEC detalló que «el módulo de órbita y el de retorno entraron con éxito en la órbita de traslado de la Luna a la Tierra».
Esto se consiguió debido a que, «a las 09.51 hora de Pekín (01.51 hora GMT) del 13 de diciembre, el módulo de órbita y el de retorno llevaron a cabo la segunda maniobra de traslado Luna-Tierra, y pusieron en funcionamiento cuatro motores 150N a una distancia de unos 230 kilómetros de la Luna durante unos 22 minutos», explicó el texto.
Más adelante, está previsto que los módulos de la Chang’e 5 realicen una corrección de órbita durante su viaje de regreso a la Tierra, y el módulo de retorno terminará por separarse del de órbita, según la fuente.
El pasado fin de semana, el módulo de ascenso desde la Luna y el de regreso se acoplaron con éxito al de órbita, que se había mantenido girando alrededor del satélite mientras el resto de los componentes recogían las muestras lunares.
Desde entonces, se habían mantenido orbitando la Luna a la espera de alcanzar la trayectoria adecuada para iniciar el regreso.
Las muestras se recopilaron de dos formas diferentes: en la superficie de la Luna, gracias a un brazo robótico, y bajo tierra, a través de un taladro que perforó dos metros el satélite para obtener muestras variadas que podrían datar de periodos muy anteriores.
El material recogido se almacenó después de un recipiente sellado al vacío para «asegurar que no le afectan las condiciones externas durante el regreso a la Tierra», afirmó entonces la ANEC.