El dirigente de Primero Justicia sostiene que las primarias de la oposición deben ser abiertas y amplias. «Si fulano de tal es alacrán y toda la gente sabe que es alacrán, al final es la gente la que decide. Si es así, se supone que la gente no va a votar por él. ¡Déjalo que se cuente! ¡Él no se va a contar, pero ponlo en evidencia!». Descarta que las diferencias internas sobre las primarias generen un peligro de fractura en el partido
Primero Justicia tiene 22 años, Henrique Capriles Radonski fue uno de sus fundadores y, desde marzo de 2000 a la fecha, ha corrido mucha agua bajo el puente que sostienen «los justicieros», que llamaron a elecciones internas el pasado sábado 9 julio para entrar en un proceso de «renovación».
Capriles Radonski habla de esto bajo la premisa de que la Venezuela de hoy no es la misma de hace dos décadas atrás y la realidad impone cambios que no tienen que ver con temas generacionales, sino de la posición que se debe asumir ante las necesidades de la gente.
Hace una diferenciación entre «la mecánica política» y la política. Reconoce que de lo primero la gente se siente harta y de lo segundo la gente sigue pendiente.
«En materia de educación, de servicios hay que proponer políticas públicas. La mecánica política es otra cosa en la que se pierden horas y se va el debate por allí, cuando la mayoría de los venezolanos está hablando de aumentar el salario mínimo y qué vamos a hacer con el agua y la electricidad, qué haremos con el tema petrolero», afirma el exgobernador de Miranda y excandidato presidencial.
Propone ocuparse de las demandas de la población para lograr conectarse con la gente y sentencia: «Si está con el discurso del interinato y esas cosas, usted se quedó en el pasado».
En la calle
Al salir de su acto de votación en la casa del partido aurinegro en Los Palos Grandes, Caracas, el dirigente atendió a los periodistas y respondió algunas interrogantes, luego gentilmente conversó otro rato con Contrapunto.com.
En la primera parte del encuentro señaló que «no hay democracia sin partidos políticos y estamos conscientes de la desconexión de la gente con los temas partidistas y sin duda ese es el reto».
Señala que la meta de los dirigentes de partidos y las personas cuya vocación son los asuntos públicos debe ser «recuperar el terreno y prepararnos para todo lo que viene. Cuando la gente que tiene la vocación por la transformación política se incorpora, triunfa la buena política».
Citgo y candidatura
Al tocar el tema de su aspiración presidencial señala «no es el tema en este momento. A todo el que tenga aspiraciones no lo critico. Es bueno que la gente tenga aspiraciones, pero ya vendrá ese debate, esa competencia. El momento de hoy es, como organización política, hacerle oposición a quienes están en el poder. No podemos pasarnos el día en la discusión de la mecánica política».
«¿A los pobres los defiende Maduro? ¡No! a los pobres no los defiende Maduro», sentencia.
Sobre el manejo de los activos en el exterior señala que el caso Citgo debe ser revisado «porque pareciera que tampoco se rinde cuentas».
Agrega que «con los que están en el poder la corrupción es lo que ha campeado y despilfarraron la mayor bonanza petrolera que ha existido en Venezuela. Sobre el tema Citgo hay que abrir un debate serio sobre cuál es el futuro y además cuál es la administración».
«Hay una corrupción roja, pero hay otra corrupción, eso sin duda alguna será un debate para que la mayoría de los venezolanos tomen su decisión. No queremos corrupción roja ni de ningún otro color. Queremos que los recursos que son de los venezolanos se inviertan en los venezolanos, que nadie se los robe. Esos serán temas que vendrán», afirma el excandidato presidencial.
Con Contrapunto
En este momento nos acercamos al dirigente que sin reparos conversa con Contrapunto.com acerca de temas del partido, primarias y negociación.
-En sus elecciones internas hay muchos consensos, pero estos procesos siempre implican el riesgo de fracturas. ¿Cómo percibe el ambiente?
-Yo creo que sería de una miopía y una desconexión absoluta. Lo que le he dicho a muchos es que sería ponerse a pelear por una botella que hay que llenar. Y esa botella la llenaría de la creencia, la conexión y la esperanza. Creo que, salvo algunos casitos puntuales, lo que privó fue la madurez y eso es una buena señal. Nunca le he tenido temor a la contienda a la competencia. En el momento que fui candidato presidencial fue producto de unas primarias. A mi no me impuso un cogollo, y la segunda vez, nadie quería ser candidato y yo lo asumí. A la contienda y la competencia no hay que tenerle miedo.
Para seguir con su respuesta se detiene un momento, medita rápidamente y señala que: «Lo que hay que tener claro es el objetivo».
«El objetivo no es ser presidente de una parroquia, el objetivo es el país. Creo que el país demanda en este momento desprendimiento, madurez y poner por encima al venezolano. Para el 2024, obviamente nosotros presentaremos nuestra opción, pero lo importante no es si el nombre es de este partido o es del otro. Lo importante es quien tenga chance, no solamente de ganar, sino de gobernar», sentencia Capriles.
Asimismo, hace hincapié en la explicación del escenario que se avecina en los próximos años y alerta: «Sabes la complejidad de una transición. Una transición no es apretar un botón y aquí arrancamos. Ese debate vendrá más adelante, aquí hay muchas cosas en desarrollo que tendrán que discutirse en su momento».
-Un partido con 22 años que habla de una renovación. ¿Qué es lo viejo en Primero Justicia? ¿Es Henrique Capriles lo viejo?
-Creo que el tema renovación no es un tema de edad. Tú tienes la capacidad de renovarte a ti mismo. Al final es un tema de pensamiento. Esta no es la misma Venezuela de hace 22 años. Si tu discurso y tu accionar político, si tu visión es la misma de hace 22 años… no has crecido. No te has reinventado, entonces, probablemente la palabra renovación no te incluye. Creo que el tema de la renovación va en la línea de los tiempos actuales.
Capriles Radonski trata de profundizar en su explicación sobre la propuesta y dice que «renovación es todo lo que piense en que al país hay que rescatarlo en lo económico y hay que buscar cómo recuperamos un tema tan sensible en Caracas como el agua. ¿Cómo hacemos para que no se vaya la luz? ¿Cómo mejoramos la pensión? Si tú estás en esa eres un renovador, pero si estás con el discurso del interinato y esas cosas,usted se quedó en el pasado».
-¿Si tú tienes 70 años estás viejo?
-Depende…
-Tu cuerpo puede estar viejo, pero no tienes porque ser viejo. Tú vez un muchacho de 20 años y parece más viejo, en términos de sus ideas y sus prejuicios, que un señor de 70 años.
-En el partido hay dos pensamientos frente al tema primarias. Uno que exige derecho de admisión y otro que sea amplio.
-No hay nada más chocante que cuando llegas a un local y vez el cartelito que dice «se reserva el derecho de admisión».
-¿Y eso puede ser un tema que genere tensión dentro del partido?
-No lo creo. Al final la opinión pública va a pesar mucho sobre el tipo de primarias que queremos. ¿Unas primarias que decida el líder de un grupo? O queremos unas primarias que decida el liderazgo amplio de una parte del país, porque el oficialismo existe.
-Y va a existir.
-Sí. Y va existir. Ese tema que se reserva el derecho de admisión no es conmigo. Yo creo en el poder que tiene cada venezolano.
Llegado este punto se detiene en la conversación un instante para remarcar un aspecto específico: «Te voy a poner el tema de los alacranes».
«Si fulano de tal es alacrán y toda la gente sabe que es alacrán, al final es la gente la que decide. Si es así, se supone que no van a votar por él, entonces: ¡Déjalo que se cuente! ¡Él no se va a contar! Pero ponlo en evidencia. No le des la excusa de que diga «a mi no me dejaron participar en esa elección y me voy por fuera». Seguro se va ir por fuera, pero tu no le puedes cerrar la puerta. Quita el cartelito de ‘se reserva el derecho de admisión'».
-Hábleme de la negociación de México. Parece que avanza en las sombras.
-Creo que al final los procesos de negociación exitosos no son delante de las cámaras ni frente a los teléfonos. Nosotros hicimos un esfuerzo en el año 2020 que trajo consigo CNE, liberaciones de presos políticos, indultos. Eso sacudió el tablero. Eso nunca se hizo frente a las cámaras. Eso no significa que lo discreto sea truculento, oscuro. Darle al país otro proceso de negociación… ¿y que no tenga resultados? ¡Coye mano! (sic). ¡¿Otro más?! ¿Qué es lo surge de ahí? La desesperanza, que es a lo que juegan los que están en el poder. Me preocupa que la oposición pise ese peine. No sé que va a pasar con México, quisiera que tuviera éxito.
-Pero se ven unos pasos: se encontraron en Noruega, excarcelaron a Rodney Álvarez, Eudis Girot y a los controladores aéreos.
-Pero no hay una señal para el país en términos de algo como el caso eléctrico en el Zulia. ¿Se consigue el proyecto? ¿Se aprueban los recursos? ¿Se asignan los recursos? Bienvenido sea, pero no me adelantaría para no crear falsas expectativas. ¿Me preguntas sobre México? ¡Ojalá!
Nos despedimos de Henrique Capriles Radonski, quien finalmente nos dice que está empeñado en «recuperar la fuerza de los que queremos un cambio en Venezuela. De la oposición que fue vigorosa. Podemos pasar el tiempo que sea haciendo un recuento de errores que se han cometido. Eso hay que hacerlo de cara al debate de 2024, para que a los venezolanos no los vuelvan a confundir con potes de humo y crearle falsas expectativas, que al final lo que ha hecho es un daño gigantesco en las filas de los que queremos el cambio en Venezuela».
