El presidente de Estados Unidos aseguró este miércoles que la «marcha atrás» de Pekín en el acuerdo comercial responde a la «debilidad» de la oposición demócrata
El presidente estadounidense, Donald Trump, aseguró este miércoles que la «marcha atrás» de China en el acuerdo comercial responde a la «debilidad» de la oposición demócrata y confirmó que el viceprimer ministro, Liu He, estará en Washington para buscar una solución esta semana.
«La razón de la marcha atrás y el intento de renegociación del Acuerdo Comercial es la sincera esperanza de que serán capaces de negociar con Joe Biden o uno de los muy débiles demócratas y así continuar timando a EE.UU. (500.000 millones al año) en el futuro», escribió Trump en su cuenta de Twitter.
«Pero saben qué, ¡eso no va a ocurrir! China acaba de informarme que ellos (el viceprimer ministro) están de camino a EE.UU. para alcanzar un acuerdo», agregó.
Con apenas dos tuits amenazando con nuevos aranceles a China, tras una tregua de más de seis meses, el mandatario provocó, este domingo, caídas generalizadas en los mercados internacionales y alejó la posibilidad de un fin a la guerra comercial entre las dos mayores economías mundiales, justo cuando se pensaba que se estaba cerca de un pacto comercial.
«Durante diez meses China ha estado pagando aranceles a EE.UU. de 25% sobre 50.000 millones de dólares en bienes tecnológicos, y de 10% hasta los 200.000 millones de dólares en otros bienes (…). Los de 10% subirán a 25% el viernes», señaló Trump entonces.
La inesperada advertencia desde la Casa Blanca llevó a Pekín a especular con la posibilidad de suspender el viaje de Liu a Washington, previsto para la semana del 6 al 10 de mayo, para una de las rondas finales de la compleja negociación comercial.
Sin embargo, este miércoles 8 de mayo, Trump se mostró moderadamente optimista.
«Veremos, estoy muy contento con los más de 100.000 millones al año en aranceles que llenan los cofres de EEUU… ¡Bueno para EEUU., no tanto para China!», concluyó.