Las remesas pueden llegar a 4.500 millones de dólares en 2020, lo que superaría las exportaciones no petroleras, enfatiza el economista.
Como quien utiliza un cinturón muy apretado, la gran mayoría del pueblo venezolano pasó el año 2019, con el consumo reducido a lo básico: alimentación y servicios. Sin embargo, en noviembre de este año ese comportamiento cambió. El economista Jesús Casique, lo atribuye al pago de bonos -tanto el sector público como el privado- y a otros incentivos.
Sin embargo, la ilusión de prosperidad -coyuntural y decembrina- no borra los indicadores de la economía, como los 25 meses en hiperinflación y la depresión económica, recuerda Casique en entrevista con Contrapunto. «Al venezolano se le olvidó el crecimiento económico», subraya. Más destaca que el sector privado está trabajando con el pulmón propio.
En el año 2020 «vamos a salir de la hiperinflación porque el gobierno parece que no tiene ningún interés en bajar o eliminar el encaje marginal», augura.
Las remesas pueden llegar a 4.500 millones de dólares en 2020, lo que superaría las exportaciones no petroleras, enfatiza.
A su juicio hay «una dolarización de facto» en Venezuela, porque «el venezolano está buscando cobertura con moneda dura, frente a un bolívar pulverizado». Ese comportamiento «va a agarrar fuerza», pronostica.
Casique propone a la población ahorrar en divisas o en bienes que representen una cobertura.