El FMI advierte en su informe de que las perspectivas a más largo plazo «siguen dependiendo de la trayectoria de la pandemia»
El Fondo Monetario Internacional (FMI) elevó las previsiones de crecimiento económico de América Latina para 2021 al 4,6 %, medio punto por encima de su pronóstico de enero, gracias principalmente al aumento de las exportaciones de la región tras el repunte de la manufactura mundial.
En 2020, la economía regional latinoamericana se hundió un 7 %, según los últimos cálculos del FMI, que en enero había estimado una caída mayor, del 7,4 %.
Así las tres grandes economías de Latinoamérica, Brasil, México y Argentina, crecerán este año el 3,7 %, el 5 %, y el 5,8 %, respectivamente, según el FMI.
Otros países latinoamericanos, como Colombia, Chile y Perú, también avanzarán el 5,1 %, el 6,2 %, y el 8,5 %, respectivamente.
Por el contrario, Venezuela sufrirá una contracción económica del 10 %.
El FMI advierte en su informe de que las perspectivas a más largo plazo «siguen dependiendo de la trayectoria de la pandemia».
Además de eso, la economista jefe del Fondo Monetario Internacional (FMI), Gita Gopinath, reconoció este martes que existe una tensión social y económica «extrema» a nivel global por el impacto de la pandemia del coronavirus y advirtió de notables divergencias debido al ritmo dispar de vacunación.
«Ha pasado un año de la pandemia de la covid-19 y la comunidad mundial todavía enfrenta una tensión social y económica extrema a medida que aumenta el número de víctimas y mientras millones de personas siguen desempleadas», señaló Gopinath en la rueda de prensa de presentación del informe de «Perspectivas Económicas Globales», presentado este martes.
En ese sentido, la economista jefa del Fondo consideró «fundamental» que se avance en la resolución de las tensiones comerciales y tecnológicas en el mundo, como las existentes entre China y Estados Unidos.
En su análisis, la organización multilateral avisó de la posible inestabilidad que puede provocar en el panorama mundial la tensión entre las dos potencias.
«Las tensiones entre Estados Unidos y China siguen siendo elevadas en numerosos frentes, incluyendo el comercio internacional, la propiedad intelectual y la ciberseguridad», apuntó la organización multilateral con sede en Washington.