En cuanto al levantamiento temporal de las sanciones por parte de Estados Unidos, el consultor de riesgo político precisó que el país se encuentra en un momento de alta incertidumbre: “El impacto puede ser muy importante, pero como todo proceso de negociación, el acuerdo está sujeto avances y retrocesos”
Frente al tambaleante panorama político en Venezuela y ante la incertidumbre sobre un posible retroceso en la reciente decisión tomada por el gobierno estadounidense en cuanto a la flexibilización de las sanciones económicas impuestas al país sudamericano, el profesor del Centro de Políticas Públicas del Instituto de Estudios Superiores de Administración (IESA), Richard Obuchi, recordó que todos los procesos de negociación están sujetos a avances y retrocesos, según el comportamiento de las partes. No obstante, se muestra esperanzado en que el avance sea el encargado de marcar la pauta en esta oportunidad.
“Sin lugar a dudas estamos en un momento crítico de una variable que puede incidir de forma importante en el desempeño económico y en otras variables de funcionamiento del país. Este alivio, este cambio en las sanciones económicas, se producen en un contexto de negociación que lleva meses, pero que no ha concluido, que conlleva acuerdos y esos acuerdos, por su naturaleza, son frágiles”, expresó en entrevista para Contrapunto.
Precisó que el país no se encuentra cercano a una situación de estabilidad, sino por contrario, está enfrentando una “enorme incertidumbre y los pasos tentativos que se van dando pueden conducirnos a diferentes caminos”.
En este sentido, recordó que tanto el paso dado para la reactivación de la mesa de diálogo en Barbados, como el cambio de posición de Estados Unidos de cara al marco sancionatorio y la oferta del Gobierno de ofrecer ciertas garantías, así como hacer algunos cambios en la situación política y social del país, están en pleno desarrollo.
“Estamos en un momento de alta incertidumbre, el impacto puede ser muy importante, pero como todo proceso de negociación, el acuerdo está sujeto avances y retrocesos, ojalá que estemos en una situación de avance”, expresó.
Panorama electoral
Al ser preguntado sobre el panorama electoral de Venezuela para el año 2024, el Director de ODH Grupo Consultor indicó que los contextos electorales son momentos que reciben mucha atención no solamente por parte de los ciudadanos del país, que tienen la oportunidad de elegir un nuevo gobierno, sino también de las empresas, organizaciones y de todos los que hacen vida o que tienen la atención puesta en Venezuela.
“Al final una elección es una oportunidad de cambios, una oportunidad de modificación del rumbo de un país y también va acompañado de incertidumbre respecto a cómo van a actuar los entes, cómo van a proceder los nuevos actores, qué posibilidades hay de que se produzca un cambio de gobierno con ello, un cambio en las políticas públicas en la forma de gestión del país en diversos elementos”, sumó.
Estima entonces que Venezuela podrá ver en las elecciones un punto crítico y una bifurcación que será clave para marcar el rumbo del país, además de convertirse en un evento que tendrá cada vez más la atención nacional e internacional: “De diversos actores que van a estar tratando de anticipar qué puede pasar, de manera de tomar las decisiones que consideren más pertinentes”.
¿El Esequibo es solo una estrategia política?
Frente a una nueva campaña para reafirmar la jurisdicción de Venezuela sobre la Guayana Esequiba, reavivada tras años de silencio por parte del Gobierno Nacional, algunos ciudadanos han considerado que se trata de una nueva estrategia política para desviar el foco de atención de otros temas y deficiencias en materia pública, Obuchi recordó que se trata de un conflicto largo y complicado, donde confluyen una gran variedad de intereses.
Explicó que además del interés de los venezolanos de mantener esa parte del territorio y conseguir una resolución de la disputa, así como la intención del gobierno de Guyana en desarrollar económicamente los recursos de los que goza el territorio y preocupación que genera la tensión que se crea entre ambos países; sin duda alguna es un elemento que al final siempre va a ser aprovechado por diversos actores y que puede tener diversos resultados con fines políticos y sobre agendas económicas.
No obstante, espera que al final el conflicto obtenga la mejor resolución posible y que el tema del Esequibo se mantenga en el interés de los venezolanos.