Pekín y varios países de la región ya sellaron varios acuerdos de cooperación para profundizar el intercambio comercial
El Gobierno de China concentra sus esfuerzos en sumar a su ambiciosa iniciativa de la Franja y la Ruta, conocida como la «Nueva Ruta de la Seda», al mayor número de países de América Latina.
Hasta la fecha, al menos 18 países latinoamericanos y del Caribe han firmado memorandos de entendimiento con Pekín para ser parte de la iniciativa propuesta por el presidente chino, Xi Jinping, en 2013 y que celebrará del 25 al 27 de abril en la capital china su II Foro de la Franja y la Ruta para la Cooperación Internacional.
La agenda de compromisos alcanzados ha permitido impulsar la cooperación en infraestructura, tecnología y otros sectores.
Recientemente, la secretaria ejecutiva de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL), Alicia Bárcena, dijo que este proyecto es un ejemplo de cómo ampliar la conectividad entre América Latina y China con una «visión profunda».
Uno de los ejemplos más exitosos de esta cooperación fue el lanzamiento del Servicio Integrado de Seguridad ECU 911 en Ecuador, el cual tuvo su prueba más importante hace tres años durante el terremoto que azotó la costa del país.
Ese sistema se instaló con infraestructura de la empresa China National Electronics Import & Export Corporation (CEIEC).
Asimismo, esta nueva ruta contempla la construcción de uno de los mayores proyectos de transmisión de energía eléctrica a nivel mundial, el cual está en su fase final en Brasil.
La firma estatal china State Grid participa en la construcción de esa red que conectará a través de 2.543 kilómetros la central hidroeléctrica de Belo Monte (norte) con Río de Janeiro.
Mientras que la empresa China Communications Construction Company Ltd (CCCC) participará en las obras para levantar el cuarto puente sobre el Canal de Panamá.
Y también participa en la ampliación a cuatro carriles de la Ruta 32 en Costa Rica, la principal autopista que conecta el centro del país con el Caribe, y en la línea Belgrano Cargas, uno de los ramales estratégicos del sistema ferroviario argentino.
Otra de las ventajas es que productos con alto valor agregado hechos en América Latina comienzan a llegar a China, como los farmacéuticos, vinos y aviones, entre otros.
El II Foro de la Franja y la Ruta para la Cooperación Internacional se llevará a cabo desde este 25 a 27 de este mes en Pekín con el tema «Cooperación de la Franja y la Ruta, dando forma a un futuro compartido más brillante».
Para Mario Cimoli, secretario ejecutivo adjunto de la CEPAL, la Franja y la Ruta permite «mayor integración, mayor diálogo y multilateralismo» y es una iniciativa que «hace bien a América Latina».
«La región, en ese diálogo con China, puede mostrar la importancia de ser un área integrada para el comercio, las políticas, la infraestructura, para poder comercializar mejor con Asia», detalló Cimoli.