Un duelo muy pacífico y aburrido dejó en deuda a Chile y Perú (0-0) de cara al futuro cercano en el Grupo A de la Copa América, en el que Argentina derrotó 2-0 a Canadá y lidera la clasificación en la primera fecha
El ‘Clásico del Pacífico’, un enfrentamiento con historias generalmente encendidas, fue apagando los animos de los miles de simpatizantes chilenos y peruanos en el estadio AT&T en Arlington, Texas, hasta solo escucharse algunos murmullos.
Ni la especial jornada para el entrenador de Chile, el argentino Ricardo Gareca, distrajo la desidia del partido entre ambas formaciones sudamericanas.
‘El Tigre’ Gareca se enfrentaba por primera vez a sus exdirigidos de Perú, donde es figura venerada por haber llevado al equipo inca al Mundial de Rusia-2018 después de 36 años de ausencia.
Desde enero está a cargo de hallarles sustitutos a los héroes de la generación dorada chilena, campeones de América en 2015 y 2016, y de exprimir las últimas gotas de talento a los remanentes de esa camada, representados por el portero Claudio Bravo y el delantero Alexis Sánchez. Otro héroe de esa hazaña, Arturo Vidal, se quedó en Chile.
A sus 41 años, solo Bravo destacó como figura al negarle goles a Miguel Araujo en el minuto 43 y a Gianluca Lapadula en el 57 y en el 89 para sostener a su equipo de pie y sellar el empate.