El sonido lleva su firma y es tan poderoso que es capaz de ceder espacio suficiente para que esté a su lado brille con luz propia. Así es Alfredo Naranjo quien junto a su Guajeo nos presenta un nuevo número que tiene sabor oriental.
Y no se trata de Carúpano ni Río Caribe, es una propuesta innovadora, junto a Hanna Kobayashi, de un tema que ya es leyenda: «Salsa caliente del Japón».
En un formato de sexteto donde el vibráfono manda y deja descansar los «bronces» de los vientos metales, Hanna Kobayashi hace un interpretación limpia sobre un arreglo que camina solo y se unta en la sangre de quien la escucha, con el sabor asiático de su origen, pero la tumba’o latino que sabe mar Caribe.
La formación del Guajeo tiene dos invitados en la «maquina de percusión» que son Gerardo López en la batería, que aporta un swing que le da personalidad al tema y Charles Peñalver en las tumbadoras que aporta la experiencia de muchos años en tarima y estudio.
El Guajeo sigue siendo esa «mágica» interacción José Soto «Mortadelo» en el bajo, José Tucky Torres en el piano, Guillermo Uribe El Primo en el bongó y sobre el vibráfono y la dirección Alfredo Naranjo.