El actor -nacido en España, pero más venezolano que la hallaca- no le teme a las pasiones fuertes y pasa de tener un poder absoluto a vivir en una cueva y a llevar en la cabeza una corona de yerbas.
La ovación que recibe cuando la obra termina no deja de sorprenderlo. La atribuye a que el público queda satisfecho por el Rey Lear, que se mete en su cuerpo, el cuerpo de Jorge Palacios. El actor José Ambrosio Díaz Palacios, nacido en Sevilla, pero completamente venezolano, asumió el reto de interpretar a uno de los personajes emblemáticos de William Shakespeare, El Rey Lear, en la Caracas del Black Friday y las colas para la gasolina.
Lear, pasa de tener un poder absoluto a quedar en la calle. «Es un rey que queda abandonado en el campo, que se enfrenta a la naturaleza y termina como un pobre mendigo, que vive en cuevas y en harapos. La hija que no lo aduló es la que lo salva y lo atiende», explica Palacios a Contrapunto.
Algún acuerdo hizo el actor con un diablo o con algún alma joven porque va a cumplir 80 años y parece de 50. Tal vez es el mismo acero que brilla en la escena de la Asociación Cultural Humboldt, donde Palacios es el Rey por tres horas.
«Son situaciones tremendas, sentimientos extremos. Lear, se fabrica una corona de yerbas y paja, y la escena es tan divertida que en medio de la tragedia el espectador logra un relax», afirma.
Es un esfuerzo físico el que asume el actor cada vez que se pone en las botas de Lear. «Yo pierdo dos kilos en cada representación, termino extenuado. Es tan fuerte que termino la actuación mareado», admite.
Este sábado 14 y domingo 15 de diciembre termina la temporada, aunque espera volver con la pieza a las tablas porque el éxito ha sido rotundo. «Otras personas quisieron montarla, pero no lo lograron. Es el personaje más difícil de Shakespeare, una obra difícil de ser montada». Contra todo pronóstico, la experiencia le confirma que en Venezuela hay público para Shakespeare.