Calificaron de injusta la medida contra los clientes que asisten a ver una proyección cinematográfica
El Instituto de Consumo del País Vasco, Kontsumobide, multó con 30.000 euros (cerca 32.000 dólares) a Yelmo, la cadena con más cines en España, tras prohibir la entrada a clientes con comida y bebida que no fuesen compradas en sus establecimientos, indicaron medios locales.
La decisión de Kontsumobide obedece a una denuncia de la organización en defensa de los derechos de consumidores Facua, afirmando que la política de prohibición de alimentos externos de la cadena de cines era injusta.
Yelmo sostiene una estricta prohibición de productos externos, negando la entrada a sus instalaciones de personas con alimentos comprados afuera. Sin embargo, Kontsumobide argumentó que, debido a que la actividad principal de un cine es proyectar películas y no ofrecer servicios de restauración, y por ello no podía comportarse como tal, ni reservarse el derecho de admisión bajo ese argumento.
Prohibir el acceso con alimentos adquiridos en el exterior de las salas está sancionado en España por un decreto legislativo de protección a los consumidores, en donde se describe como «cláusula abusiva».