Sostuvo que aquellas dificultades registradas al momento de la inscripción de algunos aspirantes ante el CNE, se debieron a irregularidades ante el TSJ
El presidente del Consejo Nacional Electoral (CNE), Elvis Amoroso, aseguró ante delegaciones internacionales que acompañarán el proceso electoral presidencial del 28 de julio, que la institución que representa ha garantizado la legalidad del registro electoral de cara a las elecciones presidenciales programadas para el próximo 28 de julio de 2024.
Precisó ante las representaciones del Consejo de Expertos Electorales de Latinoamérica (Ceela) y del Observatorio de Pensamiento Estratégico para la Integración Regional (Opeir), que todos los partidos políticos dispuestos a participar en los próximos comicios electorales tuvieron la oportunidad de registrar sus candidatos, siempre y cuando estuvieran habilitados políticamente.
Incluso, detalló «cada partido designó sus candidatos (…) se esperó hasta 5 para las 12 de la noche, para que inscribieran sus candidatos». Sin embargo, asegura que algunos partidos no se presentaron ante el llamado de registro «y luego aseguraron que no los dejaron inscribirse».
Sostuvo que aquellas dificultades registradas al momento de la inscripción de algunos aspirantes ante el CNE, se debieron a irregularidades ante el Tribunal Supremo de Justicia (TSJ): «Hay personas que no se presentaron ante el TSJ o que no tenían razón cuando acudieron al Poder Judicial», para interpelar sobre su inhabilitación. «El TSJ es el máximo ente judicial del país y nosotros tenemos que acatar sus dictámenes», aseveró.
Aseguró que posteriormente se les permitió a cada partido inscrito escoger su ubicación en los tarjetones electorales: «La MUD (Mesa de la Unidad Democrática) también se inscribió y su representante vino a escoger su ubicación aquí», añadió.
Reiteró que Venezuela cuenta con uno de los mejores sistemas electorales del mundo, asegurando que en ocasiones anteriores se ha permitido el ingreso de observadores internacionales, quienes «han podido verificar la transparencia y fortaleza» del proceso.