Introdujeron un documento este 12 de septiembre. Exigen que se respete la zonificación y que el ejecutivo municipal rinda cuentas de los ingresos que recibe por las actividades en la Concha
Un grupo de vecinas y vecinos de Colinas de Bello Monte acudieron este martes 12 de septiembre a la sede principal del Ministerio Público, en Caracas, a fin de solicitar la actuación de este organismo por las actividades de comercios en urbanizaciones cuya zonificación es residencial. También, para conocer cuánto dinero recibe el municipio por la Concha Acústica y qué se hace con esos fondos.
Maritza Molina, abogada, explicó que en su urbanización «se han venido presentando demasiadas irregularidades», como «cambios de uso de locales que están en sitios residenciales, a locales comerciales». Puntualizó que se trata de locales que vencen comida y licores «en zonas residenciales, y están abiertos hasta las 2, 3 4 de la mañana».
Otros negocios «funcionan de día, pero las personas que vienen a visitarnos se instalan en las aceras, y el peatón tiene que ir a la calle: En Colinas de Bello Monte tenemos una población de tercera edad» que sufre por esta situación, detalló.
La Concha Acústica genera recursos y el ejecutivo municipal no rinde cuentas, apuntó. «Nosotros estamos pidiendo los ingresos de la Concha, porque es en dólares. Estamos hablando de un aforo de 8 mil personas con la entrada más barata en 30 dólares, más o menos. Un 30% de lo que se recaude va a la alcaldía. Preguntamos: ¿Dónde va ese dinero?».
Molina explicó que desde hace más de un año han llevado las denuncias a la Alcaldía de Baruta, al Concejo Municipal de Baruta, a la Contraloría «y han hecho caso omiso», y cuando «llamas a la policía, para que bajen los decibeles, ellos van, vienen, reciben, están cinco minutos y se van».
El fenómeno no es nuevo, como lo recuerda Beatriz del Gallego, otra vecina que participó este martes en la entrega de las solicitudes. «Desde 2018 comenzaron con la remodelación de una casa que fue creciendo hasta que, por fin, logramos parar la obra», refirió. Igualmente contó que, al problema de los locales, se suma el de los camiones que circulan por las vías y trasladan mercancías. «No hay normas que se respeten», deploró.
Les preocupa que, subrepticiamente, se vaya imponiendo el uso comercial, como ha sucedido en otros lugares. El ejemplo de Las Mercedes es, para ellos, emblemático, y no quieren que se repita en su sector. Calculan que hay, al menos, 7 mil personas afectadas. Aseguran que el diálogo con los propietarios de locales comerciales no ha dado buenos resultados. «Somos un grupo de vecinos. Somos los dolientes. No somos ninguna asociación, no pertenecemos a ningún partido político, no nos están pagando. Lo estoy aclarando. Somos vecinos de Colinas de Bello Monte», agregó Molina.
En el MP les recibieron el documento. También están a la espera de un pronunciamiento del TSJ sobre un proceso electoral efectuado en asociación de vecinos de Colinas de Bello Monte. «Queremos que se respeten las ordenanzas», enfatizaron. «No queremos más contaminación sónica. No queremos más borrachos en la calle. No queremos más espectáculos hasta la madrugada».
Funcionarios de mediación de la PNB se acercaron al grupo de vecinos que se apostó en la entrada del Ministerio Público, en Parque Carabobo, para pedirles información sobre el motivo de la protesta. Un funcionario de seguridad del MP les dijo que no podían manifestar allí, que debían retirarse hacia la acera. Finalmente -como lo confirmó Del Gallego- les recibieron el documento.