Desde 2015 el país ha perdido 29.000 millones de dólares cada año debido a las denominadas sanciones internacionales que afectan a instituciones venezolanas entre las que destaca PDVSA.
«Desde el año 2015, la pérdida ha sido de 232.000 millones de dólares (…) lo que significó, en su momento, el 99 % de los ingresos en divisas. Es una forma de aniquilar por completo a pueblos enteros», dijo Delcy Rodríguez, vicepresidenta Ejecutiva de Venezuela, durante un seminario denominado «Unidad Nacional para la Recuperación de la Economía Venezolana ante el Bloqueo Internacional».
Aseguró que los recursos que dejaron de entrar se traducen «en pérdidas de vidas, alimentación y educación», así como en «pérdidas en el desarrollo» del país.