La manifestación salió de la avenida Vollmer de San Bernardino y terminó en la plaza Morelos, con la entrega de un documento en la Defensoría del Pueblo
¿Habría represión? El despliegue policial -con funcionarios de la Policía Nacional Bolivariana equipados con escudos- auguraba que sí. Pero la marcha de los trabajadores del sector salud salió del Hospital de Niños JM de los Ríos y llegó hasta la sede de la Defensoría del Pueblo, en la plaza Morelos, en santa paz. Honraba así el nombre que identifica la propuesta liderada por varios dirigentes gremiales y sociales, como Pablo y Mauro Zambrano, Luis Cano, Judith León y Mariela Ramírez: una ruta por la paz.
Antes de las 11 de la mañana los manifestantes comenzaron su recorrido desde la avenida Vollmer de San Bernardino.
Mariela Ramírez, del movimiento Dale Letra, remarcó que se necesita diálogo y negociación para poder resolver las necesidades urgentes de la población.
Bajaron hacia la estación de Metro de Bellas Artes, entre consignas y carreras de los funcionarios policiales.
Continuaron su marcha hacia la Defensoría del Pueblo.
Cumplieron los objetivos que se habían propuesto: entregar un documento en la Defensoría del Pueblo.
Y, ya en la propia plaza Morelos, convirtieron en discursos tantos reclamos que nadie parece escuchar.
Necesitamos la ayuda humanitaria, expresó Judith León, presidenta de la federación de colegios de bioanalistas. Seguiremos en la calle exigiendo los cambios, auguró. «Seguimos en la lucha, siempre juntos». Con la consigna Salario y protección terminó su intervención.
Prefiero morirme en la calle peleando por mis derechos, enfatizó Luis Cano, dirigente de los jubilados y pensionados. El 90% de los venezolanos estamos abandonados tanto por el gobierno como por la oposición, reclamó Cano.
Este miércoles comienza una ruta, la ruta de la paz, destacó el dirigente sindical Pablo Zambrano. Paz es un buen salario, paz es buenos servicios públicos. También resaltó que la política debe ser para servir al pueblo.
Venezuela no es que está mamando, porque en el exterior hay recursos, pero los actores políticos no se ponen de acuerdo para usarlos, reclamó. No puede ser que la agenda de los de arriba nos hunda a nosotros, sostuvo Zambrano.
Zenaida Figuera, del Sunep-SAS, puntualizó que esperan que se retome la discusión del contrato colectivo.
El documento fue suscrito, entre otros dirigentes, por Jaime Lorenzo, director de Médicos Unidos de Venezuela.
Lorenzo advirtió que, mientras las autoridades solo hablan sobre la vacuna contra la COVID-19 en Venezuela no están garantizadas las vacunas contra otras enfermedades.