«La eliminación de la mayoría de la oposición en la Asamblea Nacional complicará considerablemente los esfuerzos para resolver el enfrentamiento con el gobierno. El boicot dividió a la oposición, y el reducido apoyo a su líder Juan Guaidó plantea interrogantes sobre quién podría enfrentar al gobierno en futuras negociaciones»
Las elecciones parlamentarias del 6 de diciembre marcaron otro revés en los esfuerzos por forjar una solución pacífica al conflicto político del país. «Tras las elecciones legislativas, el presidente Nicolás Maduro controla todas las instituciones políticas principales de Venezuela. Mientras, la crisis del país se profundiza rápidamente. Una salida sigue siendo posible si el gobierno y la oposición ajustan su pensamiento de todo o nada para admitir la necesidad de un compromiso entre ambas partes. La nueva administración de Estados Unidos puede ayudar», expone la organización Crisis Group en su más reciente informe sobre la realidad venezolana.
¿Qué hay de nuevo? Después de años de agitación política, las elecciones parlamentarias de Venezuela resultaron en una predecible victoria para el presidente Nicolás Maduro. Los principales partidos de la oposición boicotearon las elecciones y, junto con EEUU y muchos países latinoamericanos y europeos, acusan al gobierno de manipular las elecciones.
¿Por qué importa? La eliminación de la mayoría de la oposición en la Asamblea Nacional complicará considerablemente los esfuerzos para resolver el enfrentamiento con el gobierno. El boicot dividió a la oposición, y el reducido apoyo a su líder Juan Guaidó plantea interrogantes sobre quién podría enfrentar al gobierno en futuras negociaciones.
¿Qué se debería hacer? La oposición debería afirmar que respalda un acuerdo negociado y descarta el derrocamiento violento del gobierno. Para iniciar las conversaciones, Maduro debería liberar a los presos políticos y controlar a la policía secreta, mientras que la administración entrante de EEUU debe reconsiderar las sanciones que causan daños humanitarios y buscar soluciones multilaterales para la crisis.