El máximo dirigente del fútbol venezolano había sido detenido en Yaracuy, por los cuerpos de seguridad del gobierno de Maduro
Berardinelli fue el primer vicepresidente que asumió las riendas de la FVF el 11 de marzo, luego de la renuncia de Laureano González.
Recientemente, Berardinelli fue detenido por agentes de la Policía Nacional Bolivariana (PNB), y trasladado a Caracas para ser presentado a los tribunales por «simulación de hecho punible, forjamiento de documento público, difamación y malversación de fondos».
Posterior a su detención fue trasladado a una clínica en la capital, luego de presentar un “síncope” con síntomas de insuficiencia respiratoria baja. Berardinelli fue asistido con “respiración mecánica” y llevado a cuidados intensivos, de igual manera se le realizó la prueba PCR para descartar que estuviera contagiado de COVID-19.
Cabe destacar que, las cuentas personales del presidente de la FVF habían sido congeladas, a pesar de que nunca se le imputó en el Ministerio Público.